El Langreo remontó un 0-2 adverso y acabó con la imbatibilidad del filial sportinguista. La gran actuación de Nacho Calvillo sitúa a los azulgranas como los únicos invictos del grupo.

Gran ambiente en Ganzábal para presenciar el encuentro entre dos de los equipos más fuertes de la categoría. Ambos conjuntos se presentaban a la cita con la condición de invictos aunque en situaciones muy distintas. El filial rojiblanco llegaba al Nuevo Ganzábal como líder, mientras que los azulgranas necesitaban la victoria para meterse en el play off y continuar en la lucha por el liderato.

El inicio no fue el esperado, ni mucho menos, por la parroquia langreana. El conjunto de Hernán salió muy nervioso, sin el empuje habitual, y con serios problemas en la parcela defensiva. Se veían superados por un Sporting B que parecía una apisonadora, y que a los 10 minutos ya tenía el partido encarrilado. Claudio fue el encargado de abrir el marcador para los rojiblancos en el minuto 4. El ex del Unión batió a Adrián Torre tras empujar a placer el balón en una buena combinación con Rubén. Apenas 5 minutos después, y sin tiempo para reaccionar, Pablo Fernández asestaba el segundo golpe de la tarde a los locales. El atacante sportinguista aprovechó un rechace en el área tras un córner, enganchando una volea que establecía el 0-2. Jarro de agua fría para los azulgranas, que parecían incapaces de parar el vendaval ofensivo visitante. Tras el segundo gol los sportinguistas bajaron la intensidad y permitieron al Unión rehacerse y entrar en el partido. Poco a poco los langreanos iban ganando protagonismo en el juego, bajo la dirección de un gran Nacho Calvillo, y acechando la meta visitante. Precisamente Nacho Calvillo sería el encargado de acortar distancias en el minuto 34. El mediocentro del Unión aprovechó un balón suelto en el área para sacarse un magistral taconazo, sorprendiendo a Dani y metiendo al Langreo de lleno en el partido. El gol espoleó a los azulgranas, que dieron un paso adelante y empezaron a asediar la meta del filial rojiblanco. Tanta insistencia tuvo su premio en el minuto 43, cuando Nacho Calvillo remató un gran centro desde la izquierda de Dani López, igualando el encuentro al filo del descanso.

A la vuelta del descanso el guión no cambió. Los azulgranas mantuvieron su empuje en busca del gol de la victoria, mientras que el Sporting B parecía seguir noqueado tras la remontada de la primera mitad. La defensa sportinguista sufría mucho, sobre todo en el juego aéreo, debido al poderío que estaba mostrando Carlos de la Nava en dicha parcela. Precisamente el tercero de los azulgrana llegaría en una jugada a balón parado. Álvaro Cuello remataba al fondo de las mallas tras una dejada de  cabeza de Carlos de la Nava en una falta lateral, culminando la remontada local. Tras el gol, el partido se rompió por completo. El filial rojiblanco se lanzó al ataque en busca del empate, mientras que el Langreo dio entrada a gente rápida como Luis Nuño, Jairo y Omar, con la intención de matar el partido a la contra. Las ocasiones se sucedían para ambos equipos, pero ninguno conseguía materializarlas. Luis Nuño estuvo a punto de matar el encuentro en el 79, pero su vaselina se fue al palo cuando ya se cantaba el gol. El tiempo se acababa, algo que desesperaba a los visitantes y que acabó por dejarles en inferioridad numérica. Pablo Fernández vio la amarilla en el minuto 88 tras una falta, y acto seguido era expulsado tras las protestas al árbitro por la decisión. Cuando el partido se encaminaba a su fin el Unión asestó el golpe definitivo. Luis Nuño remató a placer en el minuto 93 tras una buena jugada de Omar, certificando la victoria local.

Tres puntos importantísimos para los de Hernán, que igualan aún más la parte alta de la tabla, y les mete de nuevo en el play off. Tras esta victoria y la derrota del Real Oviedo "B", el conjunto azulgrana se queda como único invicto de la categoría. El Sporting "B" pierde el liderato en detrimento del Avilés, que fue el único equipo de los cuatro primeros clasificados que ganó esta jornada y de lo que se aprovecha el Langreo para trepar a la cuarta plaza.