Pizarro Gómez (Comité madrileño), asistido
por Carreño García-Bernalt y García
González. (3)
Incidencias:
Nuevo Carlos Tartiere. Terreno de juego en
perfectas condiciones. 13.452 espectadores,
según fuentes oficiales. Tarde soleada y
calurosa.
El
Oviedo volvía al Tartiere tras dos partidos fuera de
casa en los que el equipo no dejó buenas
sensaciones, a pesar de conseguir un buen resultado
en Mallorca (0-0). Los azules dominaron a un
Mirandés cómodo sin balón que no pasó muchos apuros,
pero que no inquietó a Juan Carlos en todo el
partido. El horario (16:00 h.), el calor y el sol no
evitaron que acudieran los trece mil habituales,
algunos equipados con gorros de papel.
No hubo sorpresas y, con tan sólo
un cambio en la convocatoria, la entrada de Michu
por Christian Fernández, no se esperaba una
revolución en el once titular, donde sólo hubo un
cambio respecto al partido de Mallorca, la entrada
de Jonathan Pereira en detrimento de Linares.
Los azules llevaron la iniciativa
desde del primer minuto, aunque faltos de desborde e
ideas en los metros finales. El centro del campo
sigue sin carburar y tanto Lucas Torró, como Erice,
que estuvieron muy metidos en el partido, no fueron
capaces de destacar en la creación de juego, donde
más carencias tuvo el conjunto de Fernando Hierro.
El
Mirandés, con su peculiar esquema 3-3-3-1, es un
equipo apetecible para intentar desbordar por banda
para los rivales y Fernando Hierro buscó el desdoble
de los laterales, pero sin eficacia. En el minuto 14
Toché cabeceó fuera por muy poco un centro de
Susaeta, y diez minutos después, repetía con un
cabezazo en el primer palo tras un centro de Varela
desde la izquierda. La ocasión más clara del
Mirandés fue un remate de Maikel Mesa al palo
trasero de la meta local, tras hacer un autopase a
David Fernández.
Se llegaba al descanso con el
empate sin goles y un Oviedo que no conseguía
traducir la posesión de balón en peligro contra la
meta de Sergio Pérez.
A pesar de no marcar, Toché
estuvo muy participativo y trabajador en labores
defensivas iniciando la presión. El ariete azul
finalizó alta una contra de Nando en el minuto 50.
Michu redebutó en el Carlos
Tartiere con un caluroso recibimiento tras los dos
goles marcados el jueves en Murcia. Sustituyó a un
activo Jonathan Pereira, que no paró de moverse en
todo el primer acto, aunque con pocos resultados.
Michu acompañó en la dupla atacante a Toché,
participó y tuvo un remate desde la frontal que
salió desviado.
El
Oviedo seguía buscando el gol, Hierro introducía un
cambio de refresco en la izquierda y en la medular,
dando entrada a Martín Alaniz y Edu Bedia en
sustitución de Nando y Erice, pero el equipo cambió
poco y no consiguió penetrar el área burgalesa. El
Mirandés aguantó sin pasar apuros y tuvo una gran
ocasión a la contra en el minuto 83, con el ex-sportinguista
Álvaro Bustos como protagonista, que terminó la
jugada con un remate desde la frontal que blocó Juan
Carlos sin consecuencias.
Reparto de puntos que deja mejor
sabor de boca al Mirandés. El Oviedo lo intentó,
pero adoleció de fluidez en la circulación de balón
y en los metros finales, para poder desequilibrar el
partido.
El Oviedo afronta una difícil
salida el próximo domingo (18:00 h.) con la visita
al Coliseum Alfonso Pérez, para medirse al recién
descendido Getafe.
El
Oviedo volvía al Tartiere tras dos partidos fuera de
casa en los que el equipo no dejó buenas
sensaciones, a pesar de conseguir un buen resultado
en Mallorca (0-0). Los azules dominaron a un
Mirandés cómodo sin balón que no pasó muchos apuros,
pero que no inquietó a Juan Carlos en todo el
partido. El horario (16:00 h.), el calor y el sol no
evitaron que acudieran los trece mil habituales,
algunos equipados con gorros de papel.
El
Mirandés, con su peculiar esquema 3-3-3-1, es un
equipo apetecible para intentar desbordar por banda
para los rivales y Fernando Hierro buscó el desdoble
de los laterales, pero sin eficacia. En el minuto 14
Toché cabeceó fuera por muy poco un centro de
Susaeta, y diez minutos después, repetía con un
cabezazo en el primer palo tras un centro de Varela
desde la izquierda. La ocasión más clara del
Mirandés fue un remate de Maikel Mesa al palo
trasero de la meta local, tras hacer un autopase a
David Fernández.
El
Oviedo seguía buscando el gol, Hierro introducía un
cambio de refresco en la izquierda y en la medular,
dando entrada a Martín Alaniz y Edu Bedia en
sustitución de Nando y Erice, pero el equipo cambió
poco y no consiguió penetrar el área burgalesa. El
Mirandés aguantó sin pasar apuros y tuvo una gran
ocasión a la contra en el minuto 83, con el ex-sportinguista
Álvaro Bustos como protagonista, que terminó la
jugada con un remate desde la frontal que blocó Juan
Carlos sin consecuencias.
