Casielles marcó el gol del triunfo en el añadido de la primera parte. Los marinistas mostraron muchas carencias y se alejan de la cuarta plaza.

El Astur consiguió tres puntos vitales en su intento por lograr la permanencia y el Marino aparcó, en el Hermanos Llana, sus opciones de luchar por la cuarta plaza. Casielles, en el tiempo añadido del primer periodo, marcó el solitario gol del triunfo que permite a los de Andrés Hernández seguir soñando con cumplir su objetivo.

El cuadro luanquín venía herido de su última derrota ante el Covadonga y a sus necesidades acuciantes, se unían las ausencias por lesión de algunos de sus futbolistas importantes. Dani López y Góngora, a pesar de estar tocados, ocuparon plaza en el banquillo y participaron la última media hora. El Marino, como reconoció al final su entrenador, fue un equipo plano y que en pocas fases superó a su rival. El día que más necesitaban los azules chispa y acierto, les faltó casi todo.

En contra de lo que ocurrió una semana antes en el Rabanal, el Astur no regaló el balón, ni se encerró. En la primera media hora mandaron los locales, con dos tímidos avisos por parte de Turu y Jonás. César Hevia se lesionaba y Álvaro Viña entraba en su lugar. Los gozoniegos reaccionaron antes del descanso y precisamente Álvaro gozó de una buena ocasión, pero el meta Borja Trelles salvó un balón que se colaba. Se consumía el tiempo de prolongación del primer periodo, cuando se gestó el 1-0. Recuperó la pelota el Astur y Turu, arrancando desde la divisoria, llegó arriba y su centro raso, lo aprovechó Casielles para lograr un tanto inapelable. Un mazazo para este Marino al que le cuesta mucho marcar fuera de Miramar.

Tras el descanso se esperaba una mejoría o una reacción del conjunto de Blas, pero esta se produjo tan solo a medias. Los locales reclamaron penalti en una caída de Rodri ante Roberto Suárez y en el otro área, eran Riki y Capelete quienes lo intentaban. Blas García hacía debutar al andaluz Góngora, retiraba a Gabancho, Guaya se colocó de central y Riki pasaba a actuar como lateral zurdo. Góngora, pese a su falta de ritmo, pusa ganas y encaró más de una vez. Dani López también se incorporaba e hizo que su equipo mejorase.

Los de Luanco buscaban el empate y esos riesgos, pudieron traer el 2-0. Turu mandó al exterior de la red, en el minuto 84 y el recién incorporado Abel cruzaba el balón en exceso, poco después.

Boris terminó el partido como delantero y en el 91' llegó la acción triple que pudo suponer el empate. Chutó raso Dani, rechazó Borja Trelles y, ni Capelete primero, ni Álvaro Viña después, acertaron en su remates. El Astur nunca especuló y los aciertos propios, unidos a los errores del rival, le dieron la victoria. Los de Andrés Hernández jugarán el próximo domingo en el J.A.Á. Rabanal ante el Covadonga (12.00 h.), mientras que el Marino recibirá al Gijón Industrial, también en jornada dominical (Miramar, 17.00 h.). Los luanquinos, a falta de diez jornadas, están muy lejos de sus objetivos y eso les obligará a mejorar o en su defecto, a mantener el tipo en los dos meses de competición que restan.

ÁLBUM DE FOTOS