Empate sobre la bocina

El TSK Roces consiguió empatar en el minuto 90 un encuentro que se le había puesto muy cuesta arriba tras el 0-2 de los visitantes.

Pronto consiguió el Llanes verse por delante en el marcador, concretamente a los cinco minutos de partido, tras un córner que desde la izquierda pone Juanín, balón al primer palo, para el remate de cabeza de Miguel Cedrón, que Jairo acierta a rechazar, el esférico queda en boca de gol para que Berto Toyos sólo tenga que empujarlo.

Dio la impresión que, tras verse por delante en el marcador, el conjunto de Chuchi Collado, se dedicara a defender esta ventaja, y digo que dio esa impresión porque faltando todo el tiempo del mundo, y con una ventaja tan exigua, hubiera sido un suicidio dedicarse a defender esa renta; pero si es bien cierto que el Roces se hizo con el control del esférico, aunque sin conseguir llegar con peligro a la portería defendida por Gabri, en este primer periodo un espectador más. Primer periodo en que las defensas se impusieron con claridad a los respectivos ataques. Tan solo, a balón parado, también como consecuencia de un saque de esquina que desde la derecha sirve Adro, y disparo, según le cae, de Borja, que se va desviado; consiguieron los de Cortina asomarse a la portería visitante.

Pareció, en el último cuarto de hora, despertar el Llanes del letargo, consiguiendo, no lo había hecho en todo este periodo, tener la pelota, pero al igual que le ocurría al Roces, sin llegar con peligro al área rival. Eso hasta el minuto 35’ de partido en un balón que desde la izquierda pone Jorge, alternaba ambas bandas el exterior llanisco, al primer palo para Miguel, el ariete intenta esconderla, aunque los defensores locales consiguen sacarle el esférico, con tan mala suerte para los intereses de los gijoneses, que el balón llega a Cueva, que pone en la frontal para su compañero Juanín, quien, de nuevo, sin oposición, no tiene más que enviarla al fondo de las mallas.

Máxima efectividad del Llanes en este primer tiempo, dos llegadas al área y dos goles, no se puede pedir más para una primera parte que no tuvo más historia.

Y sin demasiada historia transcurrieron los primeros minutos de la reanudación. Hasta el minuto 56 de partido en que Jorge con un disparo, abajo, desde el exterior del área, y que Jairo Acevedo consigue atajar, pareció romper las hostilidades, deportivas, cauces en los que se desarrolló todo el encuentro.

A partir de ese momento los equipos, sobretodo el local, comenzaron a llegar con mayor peligro. Así un minuto más tarde un balón colgado desde la izquierda acaba cayéndole a Adro quien de disparo raso, a la derecha de Gabri, consigue batirle.

Bien pudo sentenciar el Llanes en el 65, falta que Juanín pone en corto para Aitor Tornavaca, su envío al área es picado por Berto Toyos; atento el guardameta Jairo consigue detener.

Sobre el minuto 73 de partido tuvo el Roces hasta tres ocasiones seguidas y claras de batir a Gabri: Un disparo desde el área de Willy que se va arriba, córner cerrado desde la izquierda, a cargo de Adro, que el cancerbero saca con dificultades y disparo final, desde la frontal, de Arroyabe que finalmente no encuentra portería. Tres en una, que no encuentra su premio.

En el 80’ toma Juan Carlos Cortina una decisión arriesgada dando entrada a Pelayo Roces por Mateo y pasando a jugar con defensa de tres. Escasez de hombres en defensa que permitió a Cueva intentarlo de volea desde el interior del área, min. 81, finalmente el balón se va fuera.

Lo intentó de nuevo el Roces en el 86’ con disparo de Willy que detiene Gabri. Tres minutos más tarde trata Yoni de progresar por la izquierda, próximo a la línea de área, donde es entrado antirreglamentariamente por Pelayo. Libre directo del que se encarga Adro, magnífico lanzamiento que acaba alojado en el fondo de la portería. Sobre la bocina conseguía el Roces salvar, al menos, un punto. Emoción en los minutos de descuento, aunque el marcador ya no se movería.

Ni Roces, ni Llanes consiguen repetir victoria tras la que ambos cosecharon la jornada anterior. Un empate que, a buen seguro, deja mayor satisfacción en las filas locales, por cómo se produjo y por haberlo cosechado ante un Llanes que, aunque esta tarde no lo ha demostrado del todo, sí tiene un buen conjunto, al menos en cuanto a nombres.

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