"En la rula no preguntan, apuntan", ese era el dicho más repetido por los aficionados azules tras presenciar la victoria de los suyos en El Plantío, un triunfo que unido al resto de resultados permite al Oviedo ampliar su ventaja con el segundo clasificado.

Finalmente Sergio Egea se decantó por Borja Valle como titular en la banda izquierda en detrimento de Allyson, mientras que por parte burgalesa Gonzalo Arconada apostó de inicio por Álex Cruz y Jorge Saez junto a Carralero en la línea de mediapuntas.

Comenzó muy fuerte el Burgos, que al minuto de juego dispuso de una clara ocasión tras una internada de Carralero por la izquierda con posterior dejada de Cristian para Jorge Saez, que estrellaba su disparo en el poste. El Oviedo no daba dos pases seguidos y se limitaba a contener el intenso inicio local, aunque duró poco la agonía pues en el minuto ocho Borja Valle era objeto de una falta protestada por los locales; fue casi un saque de esquina al borde del área que Susaeta ejecutó magistralmente haciendo subir el primer gol al marcador, con cierta colaboración del portero y posiblemente del sol.

Pese al mazazo recibido, el Burgos continuó intentándolo, estrellando el segundo balón en el mismo palo en el minuto 17 tras un remate a la media vuelta de Carralero. La respuesta ovetense cinco minutos más tarde fue un remate desviado de Linares a pase de Sergio García, que recibió en posición dudosa. Los locales seguían llegando más pero tenían el punto de mira desviado, especialmente Beñat, que remató muy alto en dos acciones calcadas desde la frontal. Otro tiro lejano de Cristian obligó a intervenir a Esteban con el tiempo casi cumplido y en la jugada posterior Sergio García explotó su velocidad, superando con un gran sprint a Maureta y batiendo por debajo de las piernas a Del Val. Se llegaba al descanso con un premio excesivo para un Oviedo que sacó el máximo provecho a sus dos tiros entre los tres palos.

En la segunda mitad, el Oviedo salió a contemporizar y se vio encerrado por el Burgos en el primer cuarto de hora, aunque no sufrió en exceso. Los minutos pasaban y la posesión se fue repartiendo en una segunda parte más descafeinada y a la vez mejor controlada por los visitantes.

La expulsión por doble amarilla de Nacho López a doce minutos del final puso algo de emoción en el tramo final, Diegui ocupó el lateral derecho y los carbayones no tuvieron más remedio que replegarse. Un barullo en el área en el minuto 81 dio pie a Esteban para arañar algo de tiempo, irritando a una afición local muy descontenta con la actuación arbitral; el portero avilesino detuvo sin problemas el único tiro entre los tres palos a cargo de Gabri Gómez en el 85 y Cristian agotó los cartuchos locales con un remate picado que se envenenó y acabó golpeando el larguero en el 89.

El medio millar de aficionados azules desplazados se hizo notar durante todo el partido y los jugadores agradecieron el apoyo al final lanzando sus camisetas al fondo norte de un campo de El Plantío cuyo césped aguantó en buen estado los noventa minutos. La fría tarde burgalesa tuvo final feliz para un Oviedo que logró sin demasiado brillo tres importantes puntos que le permiten ampliar a ocho su distancia con el segundo puesto, ocupado ahora por el Murcia tras el pinchazo del Guijuelo.

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