El Marino sigue empeñado en dar alegrías a
sus aficionados y a base de insistencia y convicción derrotó al Zamora. Para
encarrilar los tres puntos, los de Manel Menéndez tuvieron que esperar al 87'.
Isma Fagir estrenó su casillero goleador en liga con un remate de cabeza que da
una gran victoria a los azules. Después de cuatro jornadas, el Marino ocupa la
primera plaza del grupo, empatado con el Guijuelo al que se enfrentará el
próximo domingo en tierras salmantinas.
Sobre el liderato pueden hacerse dos
reflexiones. Una que puede referirse a lo anecdótico del hecho porqué faltan aún
treinta jornadas y otra consideración podría ser la de poner en valor los
méritos de este Marino que solo ha encajado un gol, ha marcado cinco y no ha
recibido regalo o ayuda alguna para seguir adelante sin conocer la derrota.
Sin euforia, pero sin complejos salió el
Marino al terreno de juego. El Zamora venía de perder 0-4 ante el Valladolid B
el pasado miércoles y en Luanco fueron comedidos en los riesgos. Ordenados y con
calma, los hombres entrenados por Yago Iglesias lograron consumir muchos
minutos, hasta que les llegó el tanto de la derrota que cayó, dicho sea de paso,
del lado del conjunto más atrevido y ambicioso.
En el 8', Lora sacó una falta que buscaba
un compañero e Iricibar detuvo sin problemas. Altube puso a prueba a Jure
Marinovich en el 12' y el meta local palmeó a corner. En el 26' Lora chutó raso
e Iricibar rechazó y en el posterior saque de esquina, Dailos y Jairo Cárcaba a
punto estuvieron de cabecear un balón que acabó atrapando el meta del Zamora.
Las ocasiones llegaban a cuentagotas y un
mal despeje, propició la ocasión de Theo en el 40', pero su remate salió alto.
Pau Miguélez no acertó a rematar bien en el 44' y Jure detuvo sin problemas.
Tras el descanso, Ben Hamed, con tarjeta,
dejó su puesto a Nacho Matador que sacó la mayoría de faltas y saques de esquina
a favor y que como su antecesor, tuvo la misión de iniciar el juego desde atrás.
Jairo cabeceó fuera en el 49' y de nuevo Jairo reclamaba penalti en el 55', tras
ser desequilibrado en el salto por Javi Duro. Trabanco, Dailos y Borja tenían
nuevas oportunidades y Manel Menéndez daba descanso a Iván Fernández y a Luis
Nuño, renovando esas bandas con el gallego Julio Delgado y el cántabro Óscar
Fernández.
El Marino seguía insistiendo con ocasiones
para Borja y Trabanco y otra para Jairo en el 83', cuyo disparo rechazó Julio
Iricibar en una buena intervención. Y el premio a la insistencia llegó tras una
falta botada por Nacho Matador, un defensor zamorano no acertó a despejar y
prolongó atrás e Isma Fagir cabeceó. Aunque Iricibar tocó el balón, no pudo
evitar que este entrase. La alegría fue mayúscula en Miramar, excepto para los
desplazados desde la capital castellana.
Manel retiró a Cárcaba, sacó a Merayo y
pasó a una defensa de tres centrales para aguantar esos cuatro minutos y medio
de un tiempo añadido que concluyó con una explosión de euforia. El Zamora se
lleva otro varapalo e iniciará esta próxima semana con un partido de los
dieciseisavos Copa Federación, el próximo miércoles frente al Bergantiños en
Carballo.
El Marino preparará su partido ante el
colíder Guijuelo, encuentro que se jugará el próximo domingo en el sintético
Luis Ramos, a partir de las 17 horas.
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