Salamanca UDS y Real
Avilés igualaron sin goles en un partido con más lucha
que juego. Los avilesinos no pudieron aprovechar la
ventaja numérica en la segunda mitad, tras una primera
de mayor dominio local.

0.- Salamanca C.F. UDS: Salcedo;
Luis Martínez (Arencibia, min.76), Murúa, Kristian, Berto Espeso; Diego Benito
(Hugo Díaz, min.83), Antonio Amaro (Palomares, min.65), Telles; Iban Ribeiro (Adri
Carrasco, min.65), Jairo Morillas, David Segura (Ibra, min.46)
0.- Real Avilés C.F.: Mario
de Luis; Diego Pereira (Kilian Grant, min.65), Prendes, Adri Gómez, Juanmi
Carrión; Cedrick Mabwati (Iago Díaz, min.57), Vidorreta (Cristian Moreno,
min.65), Javi Pérez (Fernando Rufo, min.83), Sergio García (Hualde, min.57);
Ródenas, Natalio
Árbitro: Delfa
Ramos, asistido en las bandas por Sanz Texeira y Arias Silva, comité extremeño.
Amonestó a los locales Jairo Morillas, Amaro, Luis Martínez y a los visitantes
Ródenas, Vidorreta y Kilian. Expulsó al preparador físico local Pepe Losada con
roja directa por protestar (min.35) y al local Kristian por doble amarilla
(min.55).
Goles: -
Incidencias: Partido
correspondiente a la undécima jornada del Grupo I de Segunda RFEF, disputado en
el estadio Helmántico ante unos 1.800 espectadores, con presencia de medio
centenar de aficionados avilesinos. Tarde soleada y terreno de juego en buen
estado.


Duelo de renombre en El
Helmántico, una plaza tradicionalmente poco propicia
para un Avilés que no pudo pasar del empate ante un
Salamanca que fue mejor en la primera mitad y logró
defenderse sin sobresaltos tras quedarse con diez.
Trayectorias y sensaciones contrapuestas para
ambos, con un Avilés buscando consolidarse en la segunda plaza y recortar
distancia con el Adarve y un Salamanca con unos números peculiares, sólo tres
tantos a favor y seis en contra en diez partidos.
Ambos optaron por un relevo en la portería sin
mediar lesión, el gijonés Javi Benítez cedió su puesto a Salcedo en el bando
salmantino y Mario de Luis relevó a Davo en un once blanquiazul en el que se
estrenó Pereira como relevo de Nacho López.
El Salamanca entró mejor en el partido y su
impetuosa salida se tradujo en un disparo lejano de Amaro que se marchó alto y
un par de tarjetas amarillas que dejaron el listón bastante alto sin haber
superado el cuarto de hora. Superado ese primer cuarto el Avilés pareció
soltarse, acercándose por primera vez al área rival con un tiro libre ejecutado
por Juanmi Carrión que se fue por encima del larguero. Pero poco más se iban a
acercar los avilesinos, exceptuando un par de escarceos de Cedrick, en una
primera mitad de dominio charro.
Las opciones más claras para los locales
llegaron en sendos disparos de sus centrales tras dos acciones a balón parado.
Primero fue Murúa, que irrumpió con fuerza en la frontal, topándose con los
guantes de Mario de Luis a los 25 minutos; diez después, el portero madrileño
repelía un intento del mexicano Kristian Álvarez esquinado a la derecha.
El tramo final del primer tiempo fue bastante
bronco, con afición y jugadores locales mostrando su disconformidad con el doble
rasero arbitral a la hora de mostrar tarjetas. Una de las protestas desembocó en
la expulsión del preparador físico local, que llevaba la voz cantante en el
banquillo al estar sancionados el entrenador Antonio Calderón y su ayudante.
El Avilés contuvo los bríos locales en la
reanudación y se atrevió a pisar el área, reclamando un penalti sobre Pereira a
los 55 minutos y viendo cómo iba a cambiar la decoración en la acción inmediata,
justo cuando Kristian veía su segunda amarilla.
El primer movimiento de Chiqui de Paz tras
verse en superioridad fue relevar a los dos centrocampistas de banda, sin lograr
producir un efecto inmediato en el juego, con los locales enrabietados y los
visitantes sin demasiado atrevimiento a la hora de atacar.
Tras el siguiente turno de cambios, el Avilés
pasó a jugar con tres centrales, situándose en el eje de la zaga un Cristian
Moreno que volvía al equipo tras seis jornadas sin vestirse. Mucha pólvora y más
ambición en el equipo blanquiazul, que aún así no generaría demasiado peligro en
el tramo final.
Una falta en la frontal que Iago Díaz estrelló
en la barrera y un centro envenenado de Juanmi Carrión que obligó a Salcedo a
despejar a saque de esquina a diez del final fueron los lances más destacados.
Los avilesinos no lograron hacer sangre ante un Salamanca que se agazapó bien
atrás e incluso tuvo un par de contras en el descuento, que no sirvieron para
acabar con una sequía goleadora que ya dura más de un mes.
El empate le vale al Avilés para conservar la
segunda plaza y el próximo domingo, a partir de las 12 horas en el Suárez
Puerta, intentará hacerlo bueno con una victoria ante el Pontevedra.