No pudo pasar del empate el Real Avilés del
empate en su visita, casi dos décadas después, al ya renovado estadio del
Navalcarnero. Todo ello a pesar de jugar gran parte del encuentro con un hombre
más. Los intentos, el cerco y el dominio tuvieron como protagonista principal a
la escuadra de Chiqui de Paz pero la falta de pegada y el derroche de
resistencia de los rojiblancos impidieron que los tres puntos se marcharan a
Asturias. Un empate que puede saber a derrota. Pero lo importante para el Real
Avilés es que sigue sumando y que ya tiene diez puntos, que sigue invicto y
continúa en la zona alta de la tabla clasificatoria.
El devenir del partido quedaría marcado por la
expulsión del central navalcarnereño David Uña, quien en el minuto cuatro de
encuentro se encaminaba a los vestuarios al ver la cartulina roja por una
agresión al avilesino Vidorreta. La jugada había llegado tras un saque de
esquina local que Davo despejaba de puños tras remate del local Navarro.
Con uno más sobre el tapiz, el equipo de Chiqui
de Paz se haría con el control del juego, encerrando al Navalcarnero en su área
y con la circulación del balón, aunque bien es cierto es que el peligro
asturiano se limitaba a disparos desde fuera del área.
Con la posesión del balón y el control del
juego rival, el Navalcarnero prefería encomendarse a la contra. Pablo Álvarez no
movería banquillo, retrasando la posición de Miki Muñoz, y buscaría que los
suyos contrarrestaran la ventaja en el césped con ocasiones como el testarazo de
Miki Muñoz, a saque de esquina de Alex Gil.
Los avilesinos, por su parte, lo intentarían
con un disparo de Vidorreta desde fuera del área, con un remate de cabeza de
Prendes, a centro de Iago Díaz, que iba a manos de Aitor, con una jugada
combinada de Iago Díaz, Hualde y Natalio, que acababa con el remate de éste
último a las manos del guardameta navalcarnereño y con un balón colgado al área
por Javi Pérez que el capitán avilesino, Natalio, cruzaba de cabeza cerca del
palo izquierdo de la portería defendida por Aitor González. Con poco más, se
llegaría al descanso.
Consciente de la superioridad numérica, Chiqui
de Paz movería banquillo en el descanso, dando entrada a Nacho López y Cedric,
buscando engrandecer el campo con el juego exterior.
Los primeros intentos serían desde fuera del
área, con un disparo de Cedric que atrapaba Aitor. Tres minutos después, la
colgaba al área Kilian y no llegaba el mismo Cedric, por muy poco, en el segundo
palo.
Chiqui de Paz no lo terminaba de ver claro y
volvía a mover banquillo, retirando a Iago Díaz y Juan Perea, muy activo durante
la primer mitad, en beneficio de Fernando y Ródenas. Precisamente, poco después,
Hualde habilitaba un balón entre líneas sobre éste último, quien, dentro del
área, a la media vuelta, enviaba alto.
Los locales, que tiraban de resistencia y
aguante, pudieron llevarse el encuentro en una buena jugada a la contra en la
que Simón combinaba con Marcos Mendes, quien remataba, topando con el despeje de
Davo. El cuero lo atrapaba Busi y el esférico se marchaba a corner.
Poco antes del final, falta en la frontal del
área y Kilian la pelota alta, por encima del travesaño de la portería de Aitor.
Era el epílogo de un partido en el que el Real Avilés había dominado, manejado y
controlado pero había topado con un rival que demostró que en su campo sabe
competir y defendió el empate, que le supo a victoria, con uñas y dientes.