Miércoles 22 de
septiembre de 2021
Nacho Pérez Mieres
Caudal y Covadonga despachan un flojo encuentro sin
apenas ocasiones y en el que los dos tiros que hubo
entre palos en todo el partido fueron los goles.
0-1: Pablo Naredo, min. 17; 1-1: Omar Hernández (p), min. 37
Árbitro:
Pérez Albuerne, asistido en bandas por Martín Redondo y Rodríguez
Montes. Delegación del Nalón (4).
Incidencias:
Encuentro correspondiente a la cuarta jornada de Tercera RFEF disputado
en el Estadio Hermanos Antuña (Mieres). Hierba sintética. Cerca de 400
espectadores en una tarde típica de otoño con 15ºC de temperatura.
Justo
reparto de puntos en Mieres entre Caudal Deportivo y
Covadonga. El encuentro fue soso y gris, entre dos
equipos que no lograron carburar en el sintético del
Hermanos Antuña. Los mierenses dispusieron de mucha
más posesión ante un Cova muy bien plantado que
buscaba robar y transitar con espacios. Los
ovetenses anularon al Caudal, inoperante para atacar
la portería azul logrando ejecutar perfectamente su
primera parte del plan. El problema es que la
segunda, la de salir a la contra con espacios tras
el robo solo salió en muy contadas ocasiones.
El partido comenzó con un ritmo
bajísimo. El Caudal tenía la posesión porque el Covadonga se la daba y le dejaba
combinar entre su línea de tres defensas, presionando muy intenso en cuanto el
balón llegaba a la medular, especialmente a un Álvaro Pozo muy vigilado. En un
robo en la medular llegaría el 0-1. Pablo Naredo roba el cuero, avanza hasta la
frontal del área sin que nadie le salga y lanza un fuerte disparo que se cuela a
media altura pegado al poste izquierdo de Gorka Magunazelaia. Gran gol que
también sacó los colores a la defensa mierense.
El
Caudal buscó reaccionar rápido y en un buen pase
filtrado de Kang desde la derecha, Robert se plantó
ante Raúl, pero chutó fuera. Era el minuto 24 y la
primera ocasión caudalista que empataría en el
minuto 37 al convertir Omar Hernández un penalti tan
claro como innecesario cometido por Aitor Ferrero
sobre un Kang que ya había perdido el control del
balón en el área. Así se llegaría al descanso y a la
postre al final del encuentro.
La segunda parte tuvo el mismo
guión, pero con el Caudal, inoperante para mover el balón en la zona central,
optando por un juego más en largo. Así tampoco logró sorprender al Cova que tuvo
una fase de dominio en el ecuador del segundo acto en el que rondó la portería
de Gorka, pero sin lograr exigirle, pues no finalizaba. Nacho Cabo reaccionó con
sus cambios y niveló el partido, pero sin ser capaz tampoco de generar peligro.
Solo las acciones a balón parado
parecían poder cambiar el destino de un partido, pero tampoco fue así. El
partido estaba condenado casi desde el inicio a un reparto de puntos que parece
dejar más contentos a los ovetenses que a los mierenses que tuvieron en las
botas de Roberto el poder ganar, pero la gran jugada individual del canterano
saliendo entre dos defensores del Cova desde la esquina, acabó en una asistencia
que interceptó Raúl antes de que llegase a las botas de algún rematador.
Los caudalistas se mantienen
invictos, pero con tres empates en cuatro partidos y visitarán el domingo a las
18:30 horas el L’Entregu en el Nuevo Nalón. Por su parte el Cova suma su quinto
punto de la temporada y recibirá al filial del Unión Popular de Langreo el
domingo a las 12:00 horas en el Álvarez Rabanal.