La vida sigue igual en Gijón. El Sporting volvió a dominar las áreas con el papel destacado de Djurjdevic, que sigue con su idilio con el gol, y de Mariño, que firmó dos paradas de mucho mérito. Fue superior el equipo de Gallego, aunque sufrió al final por no cerrar el choque y mostró cierta debilidad en el balón parado defensivo.

La vida sigue igual a orillas del Piles, que hoy disfrutaba de su día festivo. Como tantas veces sucediera el curso pasado, Djurdjevic y Mariño desnivelaron el partido a favor del Sporting. Los rojiblancos fueron superiores, firmaron unos buenos 70 minutos, pero volvieron a necesitar del papel del serbio y del gallego para amarrar los 3 primeros puntos del curso. Tal y como sucediera hace un año, la primera jornada se resolvió por 1-0 con un gol de Djuka.

David Gallego puso en liza el mismo once que en el último amistoso ante el Lugo, dando continuidad a Valiente en el eje de la zaga y a Nacho Méndez en el doble pivote. Debutaron de inicio dos de los nuevos, dejando una buena impresión un Kravets muy incisivo por banda izquierda, y un Fran Villalba canalizando todo el juego ofensivo desde el enganche. En el tramo final jugarían también su primer partido José Luis Rodríguez y Rivera, con detalles optimistas pero sin el tiempo suficiente para emitir una opinión de cierto peso.

El Burgos cedió por completo la posesión al Sporting y tan solo se asomó una vez con peligro en la primera mitad. Un centro desde la izquierda de Fran García lo remató Raúl Navarro en el punto de penalti, adelantando Mariño su papel protagonista en el duelo.

Se vio un Sporting más vertical que el curso pasado, con mucho protagonismo por la banda izquierda, donde Kravets, Gaspar y Fran Villalba formaban un triángulo que ponía en apuros al rival. No tuvo acierto el conjunto local en el primer acto. Lo intentó Djuka con dos buenas ocasiones, pero la primera cabeceó mal y la segunda, tras quedarse solo ante el portero, disparó desde la frontal fuera, cerca del palo. Era mejor el conjunto gijonés ante un Burgos conformista con el empate, y que en muchas fases tenía a todos sus futbolistas en campo propio.

La segunda mitad no varió el escenario. Era el Sporting el que quería y era el Burgos el que firmaba el empate. David Gallego introdujo a Pedro Díaz en el medio para intentar tener más circulación por dentro. Y en una ráfaga de cinco minutos intentos, con ofensivas por ambos costados, llegó el 1-0. Centro formidable desde la derecha de Aitor García y soberbio cabezazo de Djurdjevic, en el segundo palo, a la red. El pichichi rojiblanco el curso pasado sigue con su idilio con el gol, y comienza la temporada de igual forma que la pasada: firmando el tanto del triunfo.

Le costó al Sporting cerrar el partido, sin aprovechar las ocasiones que tuvo como un disparo de Fran Villalba que se fue al lateral de la red, y el Burgos con más corazón que cabeza comenzó a asomarse la portería rival. No generó complicaciones en juego, pero si a balón parado. Dos sendos remates de Elgezabal generaron el uy primero y el oh después de las fabulosas reacciones de Diego Mariño. Reconoció David Gallego que mostró debilidad el equipo en esta faceta, algo que tendrá que corregir porque es capital en esta categoría.

Celebró El Molinón, por fin con más de 10.000 espectadores, una nueva victoria del Sporting, que hace que siga con su idilio en las primeras jornadas. Buscará sumar su segundo triunfo consecutivo el próximo sábado a las 19:30h en Tenerife.