El Avilés comenzó la fase de permanencia en División de Honor
con un discreto empate sin goles ante el segundo por la cola, un Conxo que tuvo
más y mejores ocasiones pero que careció de puntería. Los avilesinos contaban
con varias bajas importantes de inicio, a lo que hubo que añadir los sucesivos
problemas físicos de varios de sus futbolistas, que desestabilizaron al equipo,
especialmente en defensa.
Bajo una incesante lluvia sobre el sintético de Miranda, comenzaron más activos
los de Nacho Azpiazu, que alertaron a la zaga santiaguesa en un par de acciones
por la banda derecha antes de cumplirse el cuarto de hora. Primero mediante un
centro de Baba que se envenenó tras tocar en Raúl y poco después en un saque de
esquina cerrado de Mel que no encontró rematador.

El Conxo fue haciéndose dueño del centro del campo y comenzó
a pisar el área rival superado el cuarto de hora, encadenando tres acciones de
peligro que pudieron cambiar el signo del partido. Primero un disparo con la
zurda de Hugo Suárez despejado por Fueyo con el pie, de seguido un balón que
Iván Calvo no consigue cazar en el área pequeña tras un despiste de la zaga
blanquiazul y finalmente lo más clara, un derechazo lejano de Hugo Suárez que a
punto estuvo de sorprender a Fueyo, que tras rozar el balón con su manopla vio
cómo impactaba en el poste.
Una lesión por cada bando -Maxim y Sergio- obligó a ambos a mover el banquillo
antes de tiempo, en un tramo final de la primera parte bastante accidentado. El
choque bajó de ritmo y no hubo más sobresaltos en las áreas, exceptuando una
volea desde la frontal del visitante Raúl, que se marchó por encima del
larguero.
Los problemas físicos para el Avilés continuaron en la segunda mitad, la salida
de Abel, hoy central, dejó aún más coja la defensa, que sufrió para contener los
ataques de un rival que de haber tenido algo más de pegada y de precisión en el
remate podría haberse llevado un premio mayor.
En el apartado ofensivo, los locales no tuvieron continuidad en su juego y
apenas generaron peligro, su mejor opción fue un saque de esquina botado por Mel
que remató fuera Parcero en el segundo palo, no aprovechando la salida en falso
de Jorge.
El balón parado fue precisamente la mejor baza del Conxo, cuyas dos ocasiones
más claras nacieron de dos jugadas calcadas, sendos lanzamientos de falta desde
la derecha de Javi Domínguez rematados sin acierto por Hugo Suárez.
Los gallegos se quedaron con ganas de más ante un Avilés que tiene que dar por
bueno el empate a la vista de las circunstancias y mantiene una distancia de
tres puntos con la primera plaza de descenso. El próximo sábado viajará a
Redondela para medirse al Choco, a partir de las 17 horas.
