Un doblete del exdelantero caudalista de la victoria al Llanera y rompe la imbatibilidad del Caudal, que llegó invicto al Pepe Quimarán. Gran partido de los arlequinados, sin fisuras en sus líneas.

El Llanera y el Caudal, cerraron la primera vuelta del subgrupo-A y abrieron el nuevo año en el Pepe Quimarán, que después de diez meses acogió espectadores, con ganas de ver a su equipo después de la excelente campaña pasada, en una mañana que no invitaba precisamente a ello.
Por tercera vez llegaba el Caudal al Pepe Quimarán, donde no sabe aún lo que es ganar. Al igual que las dos visitas anteriores, resultó un partido tremendamente disputado, con dos equipos entregados sin reservas en un campo que exigía mucha concentración y esfuerzo físico, por la falta de espacios y por la rapidez con que se movía y desplazaba el balón.

El partido de este mediodía, era una prueba de fuego para el Llanera, después de la decepcionante y abultada derrota ante el Mosconia, ya que tiene por delante tres partidos en siete días que pueden marcar el devenir futuro; clasificarse entre los tres primeros. En esta jornada, se enfrentaban los cuatro primeros y claros aspirantes a disputar las tres plazas.

Ante el todopoderoso Caudal, el Llanera no podía fallar. Y no lo hizo. José Luis Rodríguez, realizó cinco cambios respecto al pasado domingo. Recuperó piezas en defensa y línea medular e hizo debutar al japonés Haruka, que estuvo participativo y muy luchador. Chuchi Collado, solo ha hecho un cambio; Mendi por Caique, respecto al once que el veintidós de diciembre se enfrentó al Gijón Industrial en el Hermanos Antuña.

Ya desde el saque inicial, se comprobó que no iba a ver tregua, rapidez en los pases, desplazamiento a las alas y balón frecuentando las áreas, pero encontraban respuesta en las respectivas defensas. El Caudal parecía llevar el dominio territorial pero el Llanera, salía al contragolpe con rapidez. Uno de ellos llevado por Matias se asoció con Omar Sampedro por la banda izquierda, éste dio el pase al segundo palo donde estaba Javi Sánchez que marca a placer. Una jugada muy bien elaborada y muy aplaudida.

Y diez minutos después, Raúl Paulino saca de puerta, Jorge toca de cabeza el balón que rebasa a la defensa y le llega a Javi Sánchez que encara a Javi Porrón, le quiebra a la derecha y empuja a la red el 2-0. El Llanera efectivo al cien por cien. Y el Caudal que hasta este partido había encajado cuatro goles, encaja en diez minutos la mitad (2). En el minuto treinta y seis, se produjo una falta indirecta dentro del área local, al interpretar el árbitro que Raúl Paulino luego de echar a rodar el balón lo recogió de nuevo con las manos. La falta sacada por Damián repelió la barrera del Llanera con todos sus efectivos delante de la portería. Al borde del descanso, Pantiga sacó sobre la raya el posible gol caudalista.

Arreció la lluvia en la segunda parte y el campo se fue cubriendo de una fina capa de agua, que en partes frenaba el balón. El Caudal adelantó líneas, jugó con tres defensas y entraron Coutado y Caique con tal de dar mayor movilidad al ataque caudalista. Pudo marcar el Caudal en el minuto cincuenta y cuatro, cuando al saque del quinto córner, es rematado por Borja Navarro de cabeza respondiendo Raúl Paulino con un gran desvío. Se protestó una caída de Javi Sánchez en el área, que pudo ser debida más al agua acumulada que al derribo del defensa. Poco después, Matías chutó al palo derecho de Javi Porrón.

El Caudal se echaba adelante, pero el Llanera defendía sin fisuras y realizaba los contragolpes más peligrosos a la contra. Pudo venir el 3-0 en una magnífica jugada entre Matías y Martín Pérez con tiro de éste al poste y al rechazo Omar Sampedro a tres metros de puerta volvió a rematar al larguero.

Y finalizó un partido, interesante, muy disputado, sin tregua, con gran esfuerzo físico de los dos equipos, emoción, buen juego en lo que se puede en un campo pequeño, deportividad y muy buen arbitraje, algo a lo que nos tiene acostumbrados los dos equipos pues las dos confrontaciones anteriores dejaron un grato recuerdo. El Caudal, esta vez quizá tuvo más el balón, pero el Llanera basó su justo triunfo en un buen sistema defensivo una presión desquiciante para el Caudal y efectividad plena.

La próxima Jornada inicia la segunda vuelta, el Caudal visita al Vallobín el domingo a las 12,00. El Llanera recibe al Gijón Industrial, en hora sin determinar. Pero antes, el miércoles día 6 recibe al Praviano en el Pepe Quimarán en jornada aplazada, con la cual “se pone al día” respecto a los demás.

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