El
centrocampista lamentó la ocasión marrada en el partido ante el Mirandés y
agradeció la confianza de Ziganda, que le hizo jugar su segundo partido en la
categoría de plata.
El
Real Oviedo retomó esta
mañana los
entrenamientos, donde
los jugadores que
tuvieron más minutos en
el día de ayer
realizaron una sesión
regenerativa, mientras
que el resto tuvieron un
trabajo más exigente.
No habrá descanso esta
semana y mañana volverán
a ejercitarse, a partir
de las cinco de la
tarde, en El Requexón.
Lo harán con la vista
puesta en el partido del
sábado (Anduva - 16 h.)
ante el Mirandés.
Tras
el entrenamiento
compareció en rueda de
prensa el centrocampista
Javi Mier, que jugó en
el día de ayer su
segundo partido con el
primer equipo, después
del disputado ante el
Málaga la campaña
pasada, a diferencia de
aquel día no tuvo
nervios, "estoy entrando
en dinámica con el
primer equipo y tengo
más confianza en mí
mismo". Lleva dos
temporadas jugando en
Segunda B y la mayor
diferencia que nota es
del ritmo con el balón,
no se marca ningún
objetivo a medio/largo
plazo y sólo piensa en
"ir día a día, entrenar
al máximo y si me llega
la llamada de Ziganda
aprovecharla".
Actuó
de inicio como
acompañante de Samuel
Obeng en la dupla
atacante, una posición a
la que no está
acostumbrado, "pero me
sé adaptar bien a varias
posiciones". Del partido
comentó que "la primera
parte estuvimos bien,
pero nos costó llegar
con gente al área y en
la segunda fue una
lástima las ocasiones
que fallamos".
Una
de las ocasiones más
claras estuvo en sus
botas y ya la vio
repetida "unas cuantas
veces. Me dio mucha
rabia porque luego la
ves y fue una ocasión
muy clara que pudo
significar tres puntos.
Hay que seguir mejorando
y en el partido del
Mirandés seguro que
entra alguna".
Se
enteró el sábado que iba
a ser titular y
agradeció la confianza
de Ziganda, "pero esto
acaba de empezar y tengo
que seguir trabajando en
los entrenamientos como
estoy haciendo. El
míster me pidió que
trabajase mucho, que
llegase al área y
aportase frescura al
medio campo".