El amistoso entre L'Entregu y Langreo
fue el primer partido con público en Asturias, desde que
se produjo la pandemia por la Covid-19. Trescientos
aficionados presenciaron el encuentro respetando las
medidas que recoge el protocolo: distancia de seguridad,
uso de mascarilla, ocupar una butaca durante todo el
partido...
Pepín Cueva, presidente de L'Entregu C.F., elogió el
comportamiento del público, "quedamos encantados, no hubo habiendo ningún tipo
de problema". Se vendieron 269 entradas, según informó el club, aunque la
entrada final rondó los 300 espectadores al entrar directivos, medios de
comunicación... "El ensayo de hoy salió perfecto, para el resto de partidos
esperamos una asistencia inferior y que no haya ningún tipo de problema".
El aforo inicial iba a ser de 250 espectadores, todos ellos
en la tribuna, pero ante la demanda de entradas se optó por colocar un centenar
de sillas de plástico alrededor del campo, "esperábamos bastante gente y tomamos
esa decisión para intentar que no se quedase nadie fuera". A pesar de la
recaudación, 1.345 euros, además de la rifa, "este partido no fueron todo
beneficios, simplemente el alquiler de las sillas supuso 200 euros, luego el
arbitraje y otros gastos".
L'Entregu se ha reforzado este verano en busca de dar un paso
más y Cueva reconoce que "tenemos depositadas muchas esperanzas en el equipo. Se
hizo una plantilla compensada y esperamos dar un poco de guerra y estar en los
puestos altos de la clasificación". La Tercera División se divide en dos
subgrupos y Cueva cree que "están bastante equilibrados y esperemos que todo
salga bien y no haya problemas por la Covid-19".