El presidente del Cánicas da
por segura la renovación de Fernando Fernández,
como entrenador del primer equipo,
tras el ascenso.
Arturo Redondo en el Nuevo Santa Cruz
El Cánicas regresará la
próxima temporada a Primera Regional, después de
ocho años consecutivos en Segunda. El conjunto
cangués arrasó en el grupo 1º, donde aventajaba
en seis puntos -con un partido menos- al Condal
'B' y diez al cuarto clasificado.
Arturo Redondo, presidente
del Cánicas, celebra el ascenso del regional con
la espina de que "no pudimos aún festejarlo como
tenía que ser" por la situación actual. Este
ascenso supone para el club "una inyección de
moral muy grande. Llevo cinco años como
presidente y el objetivo era subir a corto plazo
a Primera". El club cangués no se conforma y
mira ya de reojo la Preferente como fin próximo
para los próximos años.
Redondo se muestra muy
contento con el equipo de entrenadores que
tienen, "estoy encantado, hay muy buena
comunicación entre ellos". De las categorías
inferiores cabe destacar el ascenso de uno de
los equipos alevines a Segunda, categoría en la
que se mantienen el Juvenil y el Infantil. El
presidente destaca la proyección "de la
generación que va a dar este año el paso a
alevines, pienso que vamos a tener un respaldo
muy bueno".
La
continuidad de Fernandín al frente del
primer equipo se da prácticamente por segura,
"fue una apuesta personal, él tenía ganas de
volver y sabe lo que que quiere. Le di todas las
facilidades para hacer el plantel y creo que
tenemos una plantilla para competir en Primera".
No se esperan muchos cambios y esperan reforzar
el equipo con un par de fichajes para la próxima
campaña, con la intención de estar en la zona
alta de la tabla.
El Cánicas fue galardonado
con el sifón de oro "unos días antes de empezar
el confinamiento", el club recibió el premio
como "embajador y emblema deportivo de Cangas, y
como promotor de los valores del esfuerzo y
respeto".
La crisis sanitaria afectó
económicamente porque "perdimos taquillas
importantes, quedaban por venir el Arenas,
Condal 'B'... se suspendió la Sella Cup y el
Campus, que también nos suponía unos ingresos",
aunque Arturo Redondo está tranquilo porque el
club está saneado y cuenta con el apoyo del
Ayuntamiento. Los chavales ya tienen ganas de
volver a entrenar y los más pequeños "cuando me
ven por la calle siempre me preguntan cuando
vamos a poder volver".
En la actualidad cuentan con
157 socios que, a pesar del incremento de esta
temporada, son muchos menos de los casi 600 que
había hace veinte años, cuando el recibo era
mucho más elevado.