El sancionado Boedo y el lesionado Pablo Pérez se pierden
el choque ante el Getafe B. Viajan diecisiete jugadores y el lunes se
incorporará el delantero Mendi.
Insiste, casi siempre,
el entrenador Oli Álvarez en que este Marino necesita mejorar fuera de Miramar.
En Luanco el equipo está a un excelente nivel de juego y resultados, mientras
que en campo ajeno los azules lograron vencer en Barreiro y a Malata y empataron
en Ganzabal. Por ello, el partido que se disputará este domingo, a partir de las
11,30 horas en la Ciudad Deportiva del Getafe, cobra mayor importancia al ser un
enfrentamiento entre dos rivales, cuyo objetivo claro es la permanencia. El
colegiado melillense Samir Amar Abmed dirigirá este choque entre madrileños y
luanquinos.
La expedición gozoniega viajó a primera hora de la tarde del sábado y se
alojará, como es costumbre, en Alcobendas. Las marchas de Mika al Xerez y de
Abraham al Mosconia han mermado el plantel azul. El delantero Mendi viene a
compensar en parte esas carencias, pero no se incorporará hasta el lunes. Las
bajas del lesionado Pablo Pérez y del sancionado Boedo limitan a diecisiete los
jugadores que viajan para medirse al Getafe. B. En ese grupo está el juvenil
Enol quien por indicación expresa y lógica no participó en el encuentro Marino –
Victoria de Perlora de Segunda Juvenil, del pasado viernes.
La convocatoria de los luanquinos está integrada por: Javi Porrón, Chechu Grana,
Borja Álvarez, Emilio Morilla, Trabanco, Miguel Prado, Guaya, Iván Fernández,
César Suárez, David González, Alberto Lora, Luis Morán, Alex Arias, Mikel Busto,
Saha, Mathe y Enol.
Por lo que respecta al Getafe B, indicar que actualmente tiene seis puntos menos
que el Marino y que en la tarde de ayer se desconocía si su delantero Hugo Duro
entraría en la convocatoria del primer equipo o retornaría al filial. El joven
atacante participó de los minutos finales de la victoria getafense en Butarque.
En la ida, los hombres entrenados por Diego Montoya vencieron 2-3 en Luanco y
precisamente Hugo Duro marcó dos tantos, uno de ellos al transformar un penalti
y el otro en una volea perfecta y casi imposible. Es el dilema de siempre con
los filiales y con sus jugadores importantes ya que cambia mucho enfrentarse a
un equipo sin sus mejores hombres o hacerlo cuando disponen de toda la
“artillería”.
Por último señalar que el Marino – Celta B de la próxima jornada, se disputará
el domingo día 2 de febrero, a las 17 horas en Miramar.