Los de Pepe Mel, liderados por Pedri y Jonathan Viera, noquearon desde el inicio a un Oviedo que estuvo mal, nuevamente, en todas las líneas.

Clara derrota del Oviedo en Las Palmas, octava de la temporada, que deja al equipo en la penúltima posición, al final de la jornada 17. Situación negativa, aunque a un sólo punto de los puestos de permanencia que ahora marca el Racing de Santander. Pero, en el día de hoy, peor que mirar la clasificación es ver el partido del equipo en Las Palmas, donde los azules volvieron a estar mal en todas las líneas, concediendo demasiado en defensa y sin apenas generar ocasiones en ataque, con una medular que sigue sin conseguir imponerse al rival. Viera y Pedri, bien acompañados, lideraron a Las Palmas, que acabó con su sequía de victorias, aliviando la situación de Pepe Mel en el banquillo.

Javi Rozada dio entrada en el once a Javi Fernández, Bárcenas y Omar Ramos, respecto al once que dispuso en el derbi, del que se cayeron el lesionado Juanjo Nieto y por decisión técnica Riki Rodríguez y Carlos Hernández -este último ni si quiera entró en la convocatoria-. Otro que no iba a entrar era el delantero Joselu, que terminó viajando en sustitución de Edu Cortina, con gastroenteritis según informó el club el sábado a primera hora.

El partido estuvo condicionado por el gol de Juanjo Narváez, a los tres minutos del encuentro. El delantero grancanario penetró por la izquierda, puso un centro que tocó Lolo, pero no lo suficiente para alejar el peligro, recuperándolo para fusilar a Champagne con un remate que golpeó en un defensa antes de alojarse en la meta carbayona.

El Oviedo estuvo quince minutos grogui, nervioso e impreciso, pero fue entonándose con el paso de los minutos, gozando de una fase en la que tuvo varias aproximaciones al área local, principalmente con centros laterales, aunque sin ocasiones claras.

La falta de confianza en los jugadores carbayones pudo notarse en jugadas como la del minuto 27, en la que Srnic roba un balón en una zona delicada y consigue colarse en el área ante la mirada de la zaga azul, pero su disparo salió centrado y Champagne blocó sin apuros.

Los azules finalizaron la primera mitad sin chutar entre los tres palos más allá de un libre directo centrado que botó Bárcenas. El Oviedo no generó juego en la medular, por la imprecisión de Lolo y Tejera, así como la falta de apoyos. Borja Sánchez, que actuó como segundo punta, y Omar Ramos, apenas intervinieron en el juego, y Ortuño volvió a estar desasistido un partido más.

El 2-0 llegó en el minuto 39, tras un saque de banda por la izquierda, que recibió Pedri, condujo en profundidad durante unos veinte metros sin que nadie saliese a su paso, asistió a Viera y éste, de tiro cruzado, batió a Champagne.

Javi Rozada movió ficha al descanso. Retiró a dos jugadores que pasaron inadvertidos como Tejera y Omar Ramos, dando entrada a Jimmy Suárez y Mossa. El técnico apostó por un cambio de sistema, pasando a jugar con tres centrales, Sangalli y Mossa como carrileros, reforzando la medular con Borja Sánchez y dejando en la punta de ataque a Bárcenas y Ortuño. Mossa puso varios centros al área que no encontraron rematador, aunque Borja Sánchez conectó uno en el 53' y lo cabeceó fuera por poco, desde el primer palo. Previamente, en una contra tras un córner, Viera recibió en profundidad, ganó la espalda a la zaga azul desde campo propio y Champagne metió un pie salvador para alejar el peligro.

Dos faltas en la frontal del área, una en cada período, botadas por Bárcenas y Ortuño, fueron el único trabajo que tuvo Álvaro Valles, sin demasiados problemas para el meta grancanario. El que sí acertó en un libre directo fue Jonathan Viera, que convirtió una falta centrada por encima de la barrera, colando el balón por la escuadra izquierda de la meta de Champagne, que nada pudo hacer.

Bárcenas maquilló el resultado en el minuto 86, tras un buen pase interior de Sangalli, que pilló a contrapié a la defensa amarilla. El panameño les ganó la espalda y definió con elegancia, aunque el colegiado invalidó el tanto en primera instancia y hubo de esperar a la confirmación del VAR para que el gol subiese al marcador.

Las Palmas no pasó apuros en los minutos finales para lograr la victoria ante un Oviedo que dejó peores sensaciones de lo que muestra el resultado.

Arribas tuvo una actuación convincente en la tarde de hoy.