El infortunio se cebó con los luanquinos que empezaron venciendo con un gol de Mika. Dos tantos en propia meta y un penalti que supuso la segunda amarilla y la expulsión de Pablo Pérez sirvieron para que el Coruxo se llevase los tres puntos de Miramar.

1						-		3
Marino de Luanco							Coruxo F.C.
Nº	Jugadores	A	R	C	G	P	Nº	Jugadores	A	R	C	G	P
13	Javi Porrón					2	1	Alberto					2
11	Iván Fernández					2	8	De Vicente					2
18	Pablo Pérez	44'72'	72'			2	15	Lucas					2
20	Miguel Prado			86'		2	5	Crespo	41'				2
15	Guaya ©					2	18	Manu					2
16	Lora					2	6	Borja Yebra					3
8	César Suárez			74'		2	4	Jonathan Vila					2
10	Luis Morán					2	19	Álex Ares					2
14	Saha					2	11	David Añón			92'		3
7	Álex Arias					2	2	Carlos			37'		2
9	Mika			66'	4'	2	9	Silva	52'			73'	2
BANQUILLO							BANQUILLO
1	Chechu Grana (P.S.)						7	Sylla	79'		37'		2
2	Borja Álvarez			66'		2	12	Óscar M.
3	Mikel Busto			74'		2	16	Martín Fuentes			92'		s.c.
6	David González						22	Kevin Mendoza
19	Abraham Ferreres						26	P. Brea (P.S.).
21	Mathe
22	Boedo			86'		s.c.
ENTRENADOR							ENTRENADOR
"Oli" Álvarez							Míchel Alonso
Goles:		1-0 m. 4 Mika; 1-1 m. 49 Miguel Prado p.p.; 1-2 m. 73 Silva (p.); 1-3 m. 93 Lora p.p.
Árbitro:		Iglesias Gutiérrez, asistido por Toca Alonso y Mata Sangiao. Comité cántabro. (2)
Incidencias:		Miramar. Terreno de juego muy blando. Lluvia por momentos. Cerca de 500 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria de Andrés Suárez, padre de Rubén Suárez, segundo entrenador del Marino.

El Marino rompió el “encantamiento“ de Miramar y el Coruxo fue el gran beneficiado del buen número de errores que cometieron los azules. La tarde empezó de la mejor manera posible, con un gol de Mika en el minuto 4. Era el primer gol del delantero cántabro en la presente campaña y esa alegría duró hasta poco después del descanso. Una acción desafortunada de Miguel Prado suponía el 1-1 y comenzaba la cuesta arriba que se puso “más empinada” con un penalti que le señalaron a Pablo Pérez sobre Silva. Pablo Pérez se marchaba del campo tras ver la segunda amarilla y no podrá estar el domingo en A Malata. El propio Silva marcó desde los once metros. La desgracia, el desacierto o el mal día no terminó ahí. En el tercer minuto del descuento, el Marino arriesgaba y Lora se quedó como central. Una cesión del mostoleño a Javi Porrón supuso el tercero de la tarde, una tarde que empezó bien para los de Oli, pero que se fue poniendo gris, para acabar en un resultado que rompe la buena dinámica de los tres triunfos consecutivos en Miramar.

El Coruxo se llevó el premio y el regalo de los tres puntos con los que sale de la zona de descenso. Los de Michel Alonso sufrieron en la primera mitad. Un corner fue el preludio del 1-0. Guaya movió en corto para Alex que centró raso, la pelota volvió rechazada y el centro de Guaya, lo aprovechó Mika para poner el pie y lograr un tanto que le “liberaba” de una presión lógica. El campo estaba muy blando y por añadidura exigente. El Coruxo no perdió la cara al partido, pero el Marino pudo aumentar su cuenta con los cabezazos de Saha y Mika, en los minutos 17 y 28 respectivamente. Javi Porrón tuvo que intervenir ante un lanzamiento directo de falta en el 38’, a cargo de Pablo Crespo y el entrenador del Coruxo, Alonso movía “ficha” antes del descanso con la entrada de Sylla por Carlos.

El partido transcurría por unos cauces de normalidad, pero tras el paso por vestuarios todo cambió. Los vigueses lograron la igualada en una falta que sacó Borja Yebra y que intentaron rematar Vila y Sylla, pero que tocó Prado hacia su portal.

Sylla cabeceaba fuera en el 56’ y Saha disponía de una ocasión doble en el 57’. Alberto taponó el disparo del senegalés, la jugada continuó y el cabezazo final de Saha salió fuera. El público local protestó mucho la actuación del árbitro cántabro David Iglesias. En el 72’, llegó ese penalti de Pablo Pérez sobre Silva. El orensano se tuvo que marchar del campo, Silva transformó el 1-2 y los gozoniegos tuvieron que apañárselas en inferioridad numérica. El propio Silva pudo marcar poco después el 1-3, en el 76’, con una vaselina que salió fuera. Los de Oli Álvarez le echaron ganas, para acabar con una defensa donde Lora hacía de central y Borja y Guaya eran los laterales. Se jugaba la prolongación cuando Lora cedió a Porrón, con la pésima suerte de que el balón se levantó por encima del guardameta y se alojó dentro del marco local.

Al Marino le toca ahora levantarse, como muchas otras veces ha hecho y tendrá su próximo compromiso en A Malata frente al Racing de Ferrol, el domingo 1 de diciembre a las 17 horas.

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