El pichichi del Camocha marcó dos goles que ponen por delante a los gijoneses en la eliminatoria, tras un partido disputado y sin un dominador claro.

1.- Juventud Estadio: Fran Paniceres; Asdrúbal, Riestra, David, Sergio, Fran, Adri, Pelayo, Iván, Alex y Ali.
También jugaron Javi, Trillas y Guerra.
Entrenador: Aragón

2.- Atlético Camocha: Axel; Juan, Miguel, Daniel, Fernando, Rubén, Adrián, Astor, Cristian, Adrián dos Santos y Raúl.
También jugaron Hector, Pablo, Jose Luis y Jorge.
Entrenador: José Carlos Valeije

Árbitro: Álvarez Robles, asistido por Granda Barros y Boudden Fadili. Delegación de Avilés. Amonestó a los locales Iván y David, y a los visitantes Raúl, Astor, Juan y Pablo.

Goles: 0-1 m. 49 Cristian; 0-2 m. 59 Cristian; 1-2 m. 65 Iván.

Incidencias: El Cristo. Sintético. Tarde soleada. Unos 300 espectadores.

El Atlético Camocha toma ventaja de cara al partido de vuelta, que se jugará el sábado a las seis de la tarde en el campo de Vega. Los gijones aprovecharon un doblete de su delantero Cristian para llevarse un duelo muy igualado, que se resolvió en la primera parte.

Los ovetenses entraron mejor al partido y dominaron la primera mitad, aunque sin eficacia, mientras que los gijoneses buscaban un juego más directo y sacar rédito a las jugadas a balón parado.

El marcador se abrió al inicio de la segunda parte, tras un tiro ajustado al poste de Cristian al que no pudo llegar Fran Paniceres. El Estadio acusó el gol y, poco después, en un saque de banda a favor de los locales, un despeje en largo le cae a Cristian que, tras una buena jugada personal, anotó el 0-2.

El Estadio, como hizo durante toda la temporada, no bajó los brazos y recortó diferencias por mediación de Iván. El gol espoleó a los ovetenses, que fueron a por el empate y a punto estuvieron de conseguirlo. Mediada la segunda parte, una prolongación de Javi le cayó a Trillas que fue derribado en el área. Pelayo ejecutó la pena máxima y Axel detuvo su lanzamiento.

Los carbayones se volcaron en busca del empate, pero los gijoneses supieron parar el partido para cortar los envites locales, consiguiendo un gol de ventaja para la vuelta, que se presenta muy igualada.

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