El director deportivo Miguel Torrecilla confirma la continuidad del técnico para el partido frente al Málaga. “Veo fuerte a Baraja para cambiar los resultados”, señala.

Tenía la responsabilidad de decidir el futuro del banquillo del Sporting y, al menos, durante el próximo partido, el inquilino será Rubén Baraja. Así lo ha ratificado el director deportivo del conjunto rojiblanco Miguel Torrecilla esta mañana en la Escuela de Fútbol de Mareo, donde se han vivido horas de intriga, que quedaron resueltas superadas las 14 horas, momento en el que el salmantino se pronunció al respecto. “Veo fuerte a Baraja para cambiar los resultados”, justificó. Torrecilla cree que es positivo mantener la confianza ya que “en el pasado he tenido experiencias en mantener entrenadores en situaciones complicadas y, en la mayoría de veces, al final se han conseguidos los proyectos planteados”.

Confianza diez en el técnico

El salmantino indicó sobre su decisión que “no me gusta utilizar el verbo ratificar y tampoco la palabra ultimátum, tengo un 10 en confianza con respecto a Baraja”, relató y aseguró que “no es el momento de nombres, sino de hombres”. A pesar de ratificarle en el puesto, Torrecilla no pudo asegurar que la aventura del vallisoletanos e extienda más allá del partido frente al Málaga. “Todo dependerá de lo que transmita el equipo”, comentó al respecto y consideró que “si fuese por los resultados sería muy fácil tomar una decisión, pero miro más allá”, explica para cerrar el debate que se ha abierto debido a la gran crisis de resultados y sensaciones que transmite un Sporting que se encuentra muy por debajo de lo esperado, incluso para el propio Torrecilla.

Descontento de la afición

De lo que parece que no se librará el técnico y director deportivo es del enrarecido ambiente que se puede vivir en El Molinón ante el Málaga. La decisión deja a los aficionados divididos ya que un gran sector se decantaba por el cambio, dándole el relevo a José Alberto López, entrenador del filial gijonés. Una opción que, una vez más, deberá de esperar ya que el ovetense no es muy del agrado de Torrecilla para hacerse con las riendas del primer equipo.