El técnico prioriza el partido de
Liga al de Copa, aunque resalta que “es una competición
bonita”, indica que “el partido en Cádiz es nuestra
prioridad”. Habrá hasta nueve novedades en el once
titular frente al Rayo Majadahonda.

Se la juega. Rubén
Baraja está ante dos partidos que pueden marcar su
futuro en el banquillo del Sporting, pero el
vallisoletano hace especial hincapié en poner sus armas
encima de la mesa en el encuentro del domingo frente al
Cádiz. La Liga manda, es el principal objetivo del club
y por ello, todos los esfuerzos están dirigidos al duelo
del Ramón de Carranza. A pesar de ello, el encuentro de
mañana jueves en la Copa del Rey frente al Rayo
Majadahonda (20 horas) puede dejar más debilitado aún,
el puesto de Baraja que, en caso de caer eliminado, se
lo jugará todo a una carta ante el Cádiz.
Pero lo primero será
medir fuerzas ante el Rayo Majadahonda y tratar de
limpiarse la imagen dejada hace escasos diez días en el
Wanda Metropolitano. Tirará el técnico de los menos
habituales ya que puede presentar hasta nueve novedades
en el once, repitiendo solo de inicio Juan Rodríguez y
Traver con respecto a la última alineación frente al
Reus. El técnico traslada a Madrid a 27 jugadores ya
que, posteriormente, no regresarán a Gijón y realizarán
un stage de concentración en Jerez. En la expedición se
encuentran los jugadores del filial Christian Joel,
Pedro Díaz, Cordero, Pelayo Morilla y Neftalí, con
grandes posibilidades para todos ellos de participar en
el Wanda Metropolitano.
Apunta Baraja que la
Copa “es una competición bonita”, pero asegura que “el
partido de Liga en Cádiz es nuestra prioridad”. “Tenemos
que salir a competir bien y nos sirva para mejorar como
equipo”, señaló. El técnico no podrá contar nuevamente
con Blackman, será el único de la plantilla que no se
desplaza a Madrid y, posteriormente, a Jerez, debido a
unas molestias en la rodilla.
“Mi motivación es
cambiar la opinión de los sportinguistas”
“No estoy molesto, lo que pienso y siento es que tenemos
que mejorar, confío en mi trabajo, tengo seguridad en
ello, somos capaces de mejorar y revertir la situación,
entiendo las críticas y estar expuesto a ello, mi
motivación es cambiar la opinión de los sportinguistas”,
explicó Rubén Baraja sobre la situación deportiva por la
que atraviesa.
Espera hacerlo con un
cambio de dinámica, las cuales resume que “están para
cambiarlas”, consciente de que la afición sportinguista
no está contenta con la marcha del equipo. Afirma que
siente que “las señales que yo he sentido es de
seguridad y apoyo, entendiendo que la gente que manda en
el club sabe de la igualdad de la categoría y no hay que
obviar que la plantilla es nueva y que están conociendo
esta Liga, no es una escusa, pero tiene su importancia”.
El técnico agradece que la plantilla envíe un mensaje de
respaldo a la situación del vallisoletano ya que “es
importante para que crean en lo que hacen”.