El Unión Popular de Langreo se impuso por 1-0 al Orihuela y vuelve a la categoría de bronce tres años después. Omar Sampedro anotó el único gol de un partido muy trabado e igualado en el minuto 64.

1						-		0
U.P. Langreo							Orihuela C.F.
Nº	Jugadores	A	R	C	G	P	Nº	Jugadores	A	R	C	G	P
1	Adrián Torre					2	1	Emilio					2
9	Pablo Acebal					2	2	Rafita					3
5	Cristian Ferreiro					3	4	Marc	90'				2
2	Pelayo Pedrayes					3	5	Nacho					3
3	Dani López	36'				2	3	Salvi					2
6	Héctor Nespral					3	6	Fleky ©	41'		79'		3
7	Nacho Calvillo ©					3	8	Rodri			73'		2
11	Omar Sampedro				64'	3	7	Nico			63'		3
4	Urtzi Urcelay			70'		3	10	Ayo					3
8	Aimar Gulín			23'		2	11	Brian					2
10	Javi Sánchez					3	9	Antonio	65'				3
BANQUILLO							BANQUILLO
12	Andrés Cabranes			84'		2	12	Edu					2
13	Javi Díaz (P.S.)						13	Raúl (P.S.)
14	César Suárez						14	José Carlos			63'		3
15	Polo						15	Sebas
16	Cris Montes			70'		3	16	Fran					2
17	Castiello						17	Iván	85'		79'
18	Damián			23'84'		3	18	Benja			73'
ENTRENADOR							ENTRENADOR
Hernán Pérez							Miguel Ángel Villafaina (T.R. 65')
Goles:		1-0 m. 64 Omar Sampedro.
Árbitro:		Reyes Cristín, asistido por Gómez Álvarez y Domínguez Zapatero. Comité de Castilla y León. (2)
Incidencias:		Estadio Nuevo Ganzábal. Sintético. 3.872 espectadores, con presencia de un centenar de aficionados visitantes. Tarde soleada y calurosa, con más de 25º.

Omar Sampedro desató la locura en el minuto 64 en un Ganzábal abarrotado, con casi 4.000 personas, y que sirve para devolver al Unión Popular de Langreo a la Segunda División B. El avilesino recogió un rechace en el punto de penalti, tras un centro lateral de Urtzi, para fusilar a Emilio y anotar el único tanto del encuentro. El partido fue muy igualado y trabado, como se esperaba de una final de play off de ascenso donde cada error penaliza al equipo. En la primera parte ninguno corrió riesgos y apenas se vieron ocasiones de gol. Sin embargo, en la segunda parte los hombres de Hernán dieron un paso al frente en busca del gol que les devolviese a Segunda B, y que llegaría en el minuto 64. Un tanto que hizo bueno el resultado de la ida, un 2-1 logrado en el minuto 93 con un cabezazo de Nacho Calvillo que dejaba muy viva la eliminatoria.

El Estadio Nuevo Ganzábal se vistió de gala para una de sus grandes tardes. 3.872 personas acudieron al partido en el que los hombres de Hernán se jugaban el trabajo de todo el año en 90 minutos. Los primeros compases del encuentro fueron una muestra de lo que se estaban jugando ambos. Nervios e imprecisiones en un partido muy físico impedían ver llegadas de peligro, y ninguno conseguía someter al contrario. Fruto de esta intensidad Aimar tuvo que abandonar el terreno de juego a los 20 minutos, después de quedar conmocionado en un choque cabeza con cabeza  con Marc, que continuó jugando con un aparatoso vendaje tras el golpe. Con el resultado ajustado de la ida, cualquier error podía ser definitivo, por lo que ninguno asumía riesgos. Los alicantinos presionaban muy arriba, incomodando la salida de balón de los langreanos, que no conseguían hilar cuatro pases. Sin embargo, no atacaban con muchos hombres, conformándose con un empate que les servía para ascender. Desde bien pronto el partido estuvo marcado por las interrupciones y por las pérdidas de tiempo de los visitantes, que trataron de arañar segundos al cronómetro desde bien pronto y que desesperaban a la parroquia local. Brian metió el susto en el cuerpo a los langreanos a la media hora, con un disparo desde el punto de penalti que salió por encima del travesaño. La réplica la puso Javi Sánchez en el 45, con un soberbio cabezazo tras centro de Damián que obligó a Emilio a realizar una gran intervención.

Ya en la segunda parte los hombres de Hernán Pérez dieron un paso adelante, en busca de un gol necesario para ascender. Nacho Calvillo era un incordio para los alicantinos a balón parado, ya que remató todos los córners botados por los suyos. Tras varios intentos fallidos, Omar Sampedro conseguiría el gol que metía al Unión en Segunda B. Urtzi colgó un balón al área desde la derecha, que fue rechazado por la defensa visitante. Omar recogió el balón suelto en el punto de penalti y fusiló a Emilio, desatando la locura en Ganzábal. Tras el gol, fueron los asturianos quien empezaron a arañar segundos al crono y los alicantinos quienes protestaban las pérdidas de tiempo. La entrada de Cris Montes dio otro aire al equipo. El jugador canario volvió loca a la defensa visitante, que era incapaz de arrebatarle el esférico. En el minuto 75 pudo aumentar la renta de los suyos, con una gran jugada individual desde el córner que acabó con un disparo en el poste. A pesar de que el Orihuela necesitaba un gol para ascender, no generaban ocasiones que inquietasen a Adrián Torre, y eran los asturianos quienes rondaban el segundo tanto. Cabranes dispuso de una gran ocasión en el minuto 90, pero cruzó demasiado el disparo, que salió rozando el palo. Los alicantinos atacaron los últimos minutos con más corazón que cabeza, colgando balones al área sin mucho éxito. En uno de estos balones moriría el encuentro, y con el pitido final se desató la alegría de un estadio que invadió el campo para celebrar el ascenso con el equipo.

Con esta victoria el Unión Popular de Langreo consuma su ascenso a Segunda División B, donde coincidirá con el Real Sporting “B” y Real Oviedo “B”, únicos representantes asturianos tras los descensos de Caudal de Mieres y Lealtad de Villaviciosa. Además, este ascenso supone la permanencia en Tercera División del Real Avilés, y del Turón en Regional Preferente, así como el ascenso de La Manjoya a Primera Regional.

Al final tenía razón Quirós, utillero del club tristemente fallecido a principios de año, había que “espabilar a éstos y ascender en mayo”. Seguro que había alguien ahí arriba empujando a estos “talibanes”.

Álbum de fotos aquí.

Aimar Gulín hospitalizado en Villa

El mediapunta riojano tuvo que ser sustituido tras sufrir un fuerte encontronazo con un defensa del Orihuela en los primeros compases del partido. Aimar Gulín fue sustituido por Damián y, posteriormente, ingresó en Villa, donde pasará la noche.

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