El conjunto asturiano suma su cuarta victoria en un Alcoraz que no veía a vencer a un visitante desde hace 13 meses. Los de Baraja cuajaron un partido perfecto: sobrios en defensa y con mucha dinamita arriba. Sexto partido sin encajar. Los asturianos se quedan a 5 puntos de los dos primeros clasificados y ganan el golaveraje al Huesca.

El Sporting de Baraja va muy en serio. El vallisoletano planteó a la perfección el choque y se impuso con toda justicia a un Huesca que hasta ayer era líder y que estaba invicto como local. Una de las mejores versiones del curso de los asturianos propició un auténtico puñetazo en la mesa para sumar cuatro victorias consecutivas, encadenar seis jornadas sin perder ni encajar goles y asomarse ya a los puestos de ascenso directo.

Rubén Baraja apostó por su equipo de gala con la salvedad de los centrales. Las bajas de Barba y Alex Pérez obligaron al vallisoletano a estrenar una nueva pareja de zagueros: Guitián y Juan Rodríguez fueron los elegidos. Ambos rayaron a la perfección. Por su parte Rubi recuperó al Cucho Hernández y ante la ausencia de laterales derechos, confió en un chico inexperto como Kilian.

El Sporting cuajó una primera parte de equipo solvente que aspira a todo: concentrado en defensa, aguantando bien el arreón inicial del Huesca y esperando su ocasión para adelantarse en el marcador. A pesar de las múltiples faltas laterales que tuvieron a favor los locales, con un arbitraje especialmente casero, no remataron ninguna, poniendo en evidencia la mejoría en este apartado. En lo que a ocasiones para cada equipo se refiere, una para cada uno. Los oscenses con un chut de Chimy Ávila resbalándose que atajó Mariño. Y los asturianos con un centro de Jony, absolutamente diferencial, que Santos cabeceó en el primer palo para darle ventaja al Sporting.

El cambio de entrenador ha propiciado muchos cambios para bien, pero sin duda uno de ellos es ver como la ambición desde el banquillo se plasma en el césped. A pesar de ir con ventaja, el Sporting salió en la reanudación a por el segundo gol. Tanto que marcó Santos tras robar el mismo el balón a Brezancic, cabalgar hasta el área y fusilar a Remiro. Antes el Huesca pudo empatar el choque con una buena acción del Cucho, el mejor de los suyos, que terminó estrellando el balón al palo. Con espacios los asturianos se sienten como pez en el agua y pudo hacer el 0-3 en una contra de Jony que cedió a Nano Mesa, que incomprensiblemente remató fuera. El Huesca tiró de orgullo y lo intentó hasta el final, pero no encontró la recompensa del gol, entre otras cosas por una parada sublime de Mariño que se acabó estrellando en el larguero.

Los de Baraja se despegan en la tabla, son cuartos con 52 puntos, con 3 de ventaja sobre el Granada, el Zaragoza y el Oviedo, ya fuera del playoff, y a 2 del Cádiz tercero y a 5 del Rayo y el Huesca. Los madrileños son los nuevos líderes y los siguientes en visitar El Molinón-Enrique Castro Quini el sábado a las 20:45h. Jornada que puede ser crucial puesto que el cuarto (Sporting) se enfrenta al primero (Rayo) y el tercero (Cádiz) lo hace ante el segundo (Huesca).