El Covadonga fue superior, pero acabó pidiendo la hora después de perdonar la sentencia a un Llanera que marcó a falta de once minutos.

2						-		1
C.D. Covadonga							U.D. Llanera
Nº	Jugadores	A	R	C	G	P	Nº	Jugadores	A	R	C	G	P
1	Aitor Rodríguez					2	1	Alejandro	92'				2
2	David González					2	2	Javi Alonso					2
4	Aitor Ferrero					2	4	Ángel Luis ©					2
5	Beni Lázaro					3	5	Guille Díaz					3
3	Edu García					2	3	Lula					2
8	Nacho Fernández					2	6	Didi			85'	79'	3
6	Pablo Suárez	27'		67'		3	8	Juan Batalla			82'		3
9	Diego García ©					3	11	Jonás					3
10	Jaime Álvarez				31'	3	9	Dani Sampedro					1
7	Mikel Busto			74'	65'	3	10	Miguélez					2
11	Marcos Iglesias			77'		2	7	Cris Alonso			68'		2
BANQUILLO							BANQUILLO
12	Alex Sandoval			74'		s/c.	12	Plaza			82'		s/c.
13	Iván Torres						13	David
14	Jandro			77'		s/c.	14	Abraham			68'		1
15	Ángel Sáiz						15	Pablo Álvarez			85'		s/c.
16	José L. Alonso			67'		2
ENTRENADOR							ENTRENADOR
Fermín Álvarez							Pablo Detori
Goles:		1-0 m. 31 Jaime Álvarez (p); 2-0 m. 65 Mikel Busto; 2-1 m. 79 Didi.
Árbitro:		Barbeira Juste, asistido por Granda Barros y González Barros. Delegación de Avilés. (2)
Incidencias:		Juan A. Rabanal. Sintético. Mediodía de nubles y claros. Temperatura veraniega. 25ºC. 175 espectadores. Durante el descanso fueron presentados tres equipos infantiles del club.

El equipo local de Fermín Álvarez, repitió partido en casa y volvió a ganar por el mismo resultado que hace ocho días ante el Atlético de Lugones; 2-1. Este mediodía y con no poco sufrimiento al final, venció al Llanera y, aunque a distancia, ve más cerca los puestos de cabeza. Pudo el Cova asegurar la victoria ya en el primer período donde tuvo ocasiones claras ante un Llanera que se defendió bien salvo algunos lunares, pero muy cándido en ataque. 

Los primeros minutos fueron de tanteo con ligero dominio de los locales que a medida que pasaban los minutos mostraban cierta ansiedad por marcar. En los minutos quince y diecisiete, Pablo Suárez y Diego García tuvieron sendas ocasiones, el primero echó el balón fuera mientras el segundo avanzó muy bien, encaró a Alejandro pero tiró a sus manos.

 

En el minutos veinticinco Dani Sampedro echó a las nubes un buen pase de Miguélez y a continuación una buena combinación de Cris Alonso permitió a Lula tirar a puerta para ser desviado el balón a córner entre el portero y un defensa. Fue lo único peligroso en ataque del Llanera en esta parte. 

El primer gol, llegó en el minuto treinta y uno, al transformar el penalti Jaime Álvarez, luego de ser derribado Diego García por Lula. Alejandro a punto estuvo de  desviar el balón. Dos minutos después, Pablo Suárez solo ante Alejandro desbarató una clara ocasión de hacer el 2-0. 

Comenzó más animado el Llanera en el segundo período y ejerció ligeramente el dominio y ya llegaba al menos con ciertas amenazas a la portería de Aitor. A los cincuenta y tres minutos Cris Alonso centró al segundo palo y el remate de cabeza de Dani Sampedro da en el larguero y bota sobre la raya. Fue hasta entonces la mejor ocasión de los de Pablo Detori. 

Pero en el minuto sesenta y cinco, un excelente pase de Jaime Álvarez dentro del área, deja solo a Mikel Busto que fusila a Alejandro. Parecía resuelto en encuentro, pero el Llanera lejos de entregarse, pasó a jugar los mejores minutos y a los setenta y nueve, una buena combinación Javi Alonso-Jonás, el balón llega a Didi dentro del área  y cruza ante Aitor para poner el 2-1, cobrando unos minutos finales de emoción, ya que el Cova veía peligrar el triunfo. 

A renglón seguido del gol de  Didi, una falta sacada por Jonás es rematada por Guille que a punto estuvo de empatar. Fue protestada una posible caída dentro del área de Pablo Álvarez en el minuto noventa y uno. Cuando Brabeira Juste, pitó el final fue un alivio para el Covadonga, que como quedó señalado pudo tener el partido resuelto y acabó pidiendo la hora. 

Los de Fermín Álvarez, visitan al Mosconia el próximo domingo. El Pepe Quimarán acoge un más que atractivo partido entre el Llanera y el Atlético de Lugones, vecinos y nobles rivales, quienes miran de reojo los puestos peligrosos.

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