Saha Cheik, delantero del Siero, acabó con la condición de imbatido que ostentaba el único equipo español de categoría nacional, y de paso propició que su equipo se llevara un punto, merecido y muy trabajado en su visita a El Requexón.

1.- REAL OVIEDO B: Alfonso Herrero (3); Jorge Mier (2), José Martínez (2), Emilio (2), Lula (2); Álvaro Casas (2); Asier (3), Jimy (1) (Robert (s.c.), min 80), Ander (2) (Edu Cortina (2), min. 68), Marcos (1) (David Álvarez (2), min. 68); Steven (3).

1.- CLUB SIERO: Kike (3); Sergio (2), Río (3), Marcos Quintana (3), Patón (3); Herrero (2) (Oski (2), min. 76), Edu Llosa (2), Álex (2) (Trubi (2), min. 69);  Bruno Alves (2), Saha (4), Pachi (2) (Andrés (2),min.  62).

ÁRBITRO: Gao Aladro, asistido en las bandas por Seoane Gómez y Blanco Marinero, de la delegación de Gijón. (2). Mostró cartulinas amarillas a los locales Jorge Mier, Emilio, Lula, Marcos y  Asier (2) y a los visitantes Kike, Río, Herrero y al preparador físico, Alberto Colunga. Rojas a Asier (m. 84) y Edu Llosa (m. 88)

GOLES: 1-0 m. 72 Steven; 1-1 m. 89 Saha.

INCIDENCIAS: Campo nº 1 de El Requexón. Terreno de juego en buen estado. Alrededor de 225 espectadores, entre los que se encontraban el presidente del Real Oviedo, Jorge Menéndez Vallina, y Fernando Hierro, entrenador del primer equipo azul.

El filial del Real Oviedo, que se había adelantado en el marcador en el minuto 72, merced a un gol de Steven, encajó el primer y único gol de la temporada en el minuto 88, por lo que se mantuvo imbatido durante 808 minutos, más los minutos añadidos por los colegiados en los ocho partidos precedentes, a los que hay que añadir los dos últimos encuentros de la fase previa de la Copa Federación, en los que tampoco recibió gol alguno.

Y el caso es que los polesos, que nunca le perdieron la cara al partido, ya estuvieron a punto de perforar el porta defendido por Alfonso Herrero a los siete minutos, cuando Pachi se plantó ante el portero madrileño y, con todo a favor, envió el balón por encima del travesaño. A renglón seguido, oportunidad del filial en las botas de Asier, que también remató rozando el larguero.

A partir de ahí, el encuentro entró en una fase en la que el balón rondó del un área a otra sin peligro para la integridad de ninguna de las dos porterías, hasta que Asier, en el minuto 41, remató de cabeza a las mallas un balón centrado por Steven desde la línea de fondo, tanto que invalidó el colegiado, a instancias de su asistente, que señaló que el balón había rebasado la línea de fondo cunado centró el delantero azul, decisión muy protestada.

En la continuación, los primeros minutos tuvieron cierto color visitante y durante los mismos se jugó más en la parcela oviedista que en la polesa, dando lugar a que Saha, dueño de los balones aéreos, crearan cierto desconcierto en las filas locales cada vez que se producía un saque de esquina o una falta.

El guardameta local tuvo que emplearse a fondo para evitar que el mencionado Saha batiera su portería en el minuto 70, al rematar un buen servicio de Patón, dueño de la banda izquierda. Pero lo que no acertó a hacer el espigado delantero del conjunto que dirige José Aníbal López lo consiguió dos minutos después el local Steven, que puso el 1-0 en el marcador al cabecear un centro de Asier desde la izquierda.

Asier, que había visto una amarilla en el minuto 48, vio la segunda tarjeta en el 84, por impedir, colocándose cerca del balón, un lanzamiento de falta. A raíz de quedarse con diez, empezó a sufrir más el Oviedo B y el Siero, jugándole al filial sin complejos, se fue a por el gol del empate, que llegó en el minuto 88, al cabecear Saha otro buen centro de Patón desde la izquierda del ataque de los de El Bayu, gol que el Senegalés, y sus compañeros de campo y de banquillo, celebraron como si supusiera un título y que lo cierto es que vino a hacer justicia en un partido en el que los dos equipos acabaron con diez, porque el colegiado también expulsó al poleso Edu Llosa, jugador que, por cierto, militó en el juvenil azul de División de Honro. El mediocampista visitante vio la tarjeta roja, tras el gol de su equipo, por hacerle un feo gesto al local Steven.

A modo de resumen, se quitó el Oviedo B un gran peso de encima al perder su condición de imbatido y arrancó el Siero un merecido punto tras un partido en el que destacó el buen hacer en ambas área --defendió muy bien en la propia y creó mucho peligro en la ajena-- de Saha.

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