La primera parte fue equilibrada aunque si se tratara de una competición a los puntos, las mejores ocasiones fueron visitantes. La mejor, un disparo de Quero tras jugada personal que se estrelló en el lateral de la red. A continuación y mediado este primer tiempo, un disparo de Marcos Iglesias lo detuvo con apuros Bussman echándose al suelo. Dos acercamientos más del Caudal se saldaron con dos tiros de Llerandi que se fueron altos y así se llegó al descanso con 0-0.

En la reanudación cambió el panorama. Salieron los de Iván Ania más enchufados y una jugada por la banda izquierda de Javi Sánchez junto a Invernón y Damián terminó en un centro que Martins remataba en boca de gol para adelantar a su equipo en el marcador.

En el minuto 64 comenzaba el partido a ponerse bronco. Una jugada por la derecha de Natán y su envío al área fue para Marcos Iglesias que no llegó al mismo por estar sujetado y obstaculizado por Iván. El árbitro señalaba la pena máxima que fue muy protestada por la defensa visitante, uno de ellos, Super, veía la segunda amarilla por protestar y tenía que irse al vestuario. El Pichichi cearista marcaba de tiro fuerte y seco para poner las tablas.

Una jugada sin aparente importancia fue el desencadenante de una importante trifulca tanto en el campo como fuera de él. Un córner botado por el Caudal al área cearista da con Noel Alonso en el suelo tras un choque con Miguel llevándose las manos a la cara. El árbitro interpreta simulación por parte del defensa caudalista al que le muestra la segunda amarilla y la posterior roja provocando la ira del futbolista que perdió los nervios encarándose con el colegiado y teniendo que ser separado por sus compañeros. Esto provocó un intercambio de impresiones entre seguidores de ambos equipos que se fueron acalorando y haciéndose más patentes según avanzaba el partido.

El Caudal se quedaba con 9 jugadores con 20 minutos por delante para intentar defender el punto o por el contrario irse a por el partido. Los de Ania optaron por la segunda vía a expensas de un posible contragolpe del Ceares que pudiera decantar el duelo a su favor y a punto estuvo de ser así si Ponte hubiera estirado más el pie en un envío de Natán desde la derecha.

A dos minutos del final y en una jugada por la izquierda un disparo de Quero era rechazado por Davo con el pie, Emilio cerca de la raya de gol empuja el balón a la red para darle la victoria a su equipo. El banquillo caudalista se excedió en su celebración lo que los aficionados gijoneses entendieron como una provocación, encendiendo los ánimos en la zona de los banquillos aunque no pasó a mayores.

Sufrida victoria del líder que con 9 se fue a por el partido y consiguió su cometido, empañado, quizás por el comportamiento de alguno de sus componentes que no le impide aprovechar el traspiés del Langreo en casa. El Llanes será su próximo compromiso en el Hermanos Antuña. Por su parte el Ceares, que cuajó un buen partido, no pudo llevarse nada positivo de un choque donde mereció más. Repetirá en casa ante el Covadonga en la mañana del domingo.