El Burgos remonta al Marino en los minutos finales

Los luanquinos realizaron un buen partido, pero se relajaron al final. Un golazo de Boro, en un libre directo, supuso el 1-0. En los últimos diez minutos remontó el cuadro burgalés.

El sino del Marino esta temporada se repite y como ocurriera ante el filial sportinguista y el Real Avilés, les sobró el segundo tiempo y sobre todo los instantes finales. Frente al Burgos, los de Marco Díaz estaban despachando un buen partido, un lanzamiento magistral de falta a cargo de Boro suponía el 1-0, Diogo más tarde a punto estuvo de marcar el segundo y de ahí se pasó al "lapsus" de casi siempre. Los de Gonzalo Arconada apretaban y en los minutos 81 y 88, Gabri y Carralero le daban la vuelta al marcador. Los luanquinos no pudieron ayudar a los otros equipos asturianos inmersos en la lucha por evitar el descenso y el Burgos celebró por todo lo alto sumar tres puntos de oro en esa huida de las posiciones de peligro.

Sin ningún tipo de presión y sabiéndose descendidos, los de Luanco despacharon un partido muy digno. José Luis ejerció de meta titular y las diferentes ausencias propiciaron las inclusiones en el once inicial de Boro y Diogo. Los locales avisaban con un centro-chut de Draman y un disparo de Adri, a los cinco minutos. Poco más tarde, Carralero anduvo listo y aprovechó un error defensivo para plantarse ante José Luis. El lateral Pablo Suárez salvó bajo palos ese gol "cantado". Aurreko detenía un disparo de Draman, Quesada cabeceaba fuera y Merino desperdició una oportunidad clara, chutando fuera del marco.

El Burgos sufría para llevar el balón arriba y el Marino cumplió con decoro en los primeros cuarenta y cinco minutos. Tras el descanso llegaron los tres goles. Una falta lanzada por Boro, de forma magistral y por la escuadra superior del primer palo, suponía el 1-0. Arconada realizó el doble cambio, incorporando a Gabri Ortega y Cristian, actores importantes en los goles que llegaron más tarde. A los 70 minutos pudo llegar el 2-0, tras un remate de "chilena" a cargo de Diogo. El balón pegó en el larguero primero y en la línea de meta después. Hubiese sido la sentencia para un partido que acabó desnivelándose de forma inesperada. El ex-marinista Raúl Rodrigo era el tercer cambio visitante, Llorente y Quesada malograban ocasiones y Diogo dejaba su puesto a Imanol.

A los 81 minutos, Gabri, de cabeza, lograba la igualada, tras una falta lateral y cuando el partido expiraba, Carralero, tras un buen centro de Cristian, marcaba el 1-2. Una acción en la que los jugadores luanquinos fueron condescendientes con el avance de Moke y con la penúltima acción de Cristian.

El Burgos respiró en Miramar y el Marino se quedó con el sabor agridulce de una derrota que se pudo evitar. Los gozoniegos jugarán el domingo 12 de abril, ante la Cultural Leonesa, en el Reino de León ( 17 horas ) y disfrutarán de vacaciones hasta el próximo lunes.

RUEDA DE PRENSA

Para Gonzalo Arconada, técnico del Burgos, el triunfo era muy importante. Señaló que: " No entramos bien en el partido y no supimos leer lo que demandó el juego en la primera parte. Tras el descanso mejoramos, a pesar de que su gol fue un mazazo. Las incorporaciones de Gabri y Cristian nos dieron más variantes y aportaron cosas que necesitábamos. Los tres puntos nos ayudan a salir de ahí abajo y ante el Lealtad y el Langreo trataremos de cerrar los puntos necesarios para eludir el descenso. Siento que el Marino terminé la temporada así y les deseo que retornen a la Segunda B cuanto antes".

El entrenador del Marino, Marco Díaz indicó que: " No puedo reprochar nada a mis jugadores que han peleado e incluso hemos podido marcar el segundo gol. Nuestros errores nos penalizan en exceso, ocurrió lo mismo frente al Sporting B y el Avilés. Con una falta previa hubiésemos evitado el segundo gol del Burgos. El lunes volveremos al trabajo tras otro resultado adverso y nadie podrá decir de nosotros que no intentamos ganar todos los partidos. Frente al Burgos buscamos la victoria, la merecimos y la necesitábamos por ayudar a los otros equipos asturianos y por nosotros mismos que precisábamos una compensación tras perder inmerecidamente muchos encuentros. Pero una vez, más no pudo ser".

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