El Oviedo pierde la tercera plaza ante un Racing superior

Los azules sucumbieron en un partido que rápido encarrilaron los locales. Los azules pierden opciones de acabar en el tercer puesto tras un partido donde el arbitraje fue muy discutido por los carbayones.

Los pupilos de Hernán tenían una misión complicada: ganar en Santander para conservar la tercera plaza e intentar poner el gol average a su favor. Por desgracia, el partido se complicó en los primeros minutos, y el árbitro no colaboró en que la suerte de los oviedistas fuera distinta.

El Racing abrió el marcador muy pronto, en la primera jugada de peligro, donde Mario se quedó completamente solo frente a Nacho y batió al cancerbero azul sin problemas. Pero el Real Oviedo demostró que iba a por el partido, y nada más sacar de centro, Jimmy golpea el balón en un pase perfecto a Viti, al que Ángel sólo puede frenar con una dura entrada dentro del área. El penalti es claro, la amarilla también, y Edu Cortina transforma en el 1-1.

Poco les duró la alegría a los carbayones, pues apenas tres minutos después, Pau se consigue ir de Pablo y Fran, y ante la poca dureza de los defensas, que podían haber frenado la jugada con una falta, se mete hasta la cocina, donde Nacho no puede hacer nada para evitar el gol. A pesar de ello, los de Hernán no bajaron los brazos, sino que presionaban cada jugada para recuperar el balón. Los minutos pasaban sin acercamientos claros de ninguno de los dos equipos, con muchas pérdidas en el centro del campo, aunque la táctica estaba clara: el Real Oviedo buscaba pases cortos y posesión para llegar al área rival mientras que el Racing, más fuerte en el juego aéreo, y sobre todo más contundente, algo que se demuestra en la cantidad de tarjetas amarillas que vieron, intentaba sorprender a la contra. En el minuto 22 Unai dispara desde lejos, tras un rechace de Nacho, sin que el portero logre reaccionar a tiempo, en el que sería el último gol de la primera parte, la cual pasó con el Real Oviedo esforzándose en recortar distancias, pero con un rival que demostraba la necesidad que tenía de dar un golpe en la mesa ante un rival directo. La primera parte termina con una ocasión para cada equipo: una falta cerca del área que Jorge dispara demasiado elevado, y una ocasión de Mario que Nacho despeja a saque de esquina.

El descanso vino bien a los azules, que recuperaron el empuje en el principio de la segunda parte, y donde una jugada pudo haber cambiado el curso del partido: pasados apenas 5 minutos de la reanudación, logran la primera llegada peligrosa, donde Vicente desde la frontal del área, con todo a su favor, dispara y el balón da al palo; desde fuera del área Edu continúa la jugada y golpea de primeras, pero Peón se tira bien abajo y consigue rechazar; entonces es Viti quien caza el balón y logra batir al portero rival; el árbitro mira al linier y, cuando los azules ya estaban celebrando el gol, pasados unos segundos, el asistente levanta la bandera, anulando así un gol perfectamente legal. Ante las quejas de los oviedistas, Edu se lleva la única tarjeta que vería el Oviedo en el partido. Los visitantes siguieron intentándolo, mientras que el Racing se encerraba atrás intentando conservar el resultado; la ocasión más clara para los azules fue una falta al borde del área que tira Jorge y Peón despeja con apuros.

Ante ese panorama, Hernán decide mover banquillo, quitando a los dos laterales y dando entrada a Miguel y Asier, en un cambio claramente ofensivo. Por desgracia, eso originó lagunas en defensa, que dieron lugar al cuarto gol, obra de Mario.

A falta de 10 minutos, entran los cambios que le quedaban al Oviedo, Yuly y Dani Corgo, pero las intentonas de los oviedistas, sobre todo por medio de Asier, las cortaban con faltas los racinguistas, ante las que el árbitro miraba hacia otro lado.

El partido acabó con un Oviedo desganado, ante las ocasiones perdidas y la mejor forma física de su rival, un partido que vuelve a dejar a los asturianos cuartos, a falta de dos jornadas para el final de liga.