Díaz Galán: “Los entrenadores somos facilitadores
de circunstancias”
A las 13 horas fue presentado el
nuevo entrenador del Real Avilés, Ismael Díaz Galán, en
presencia del director deportivo José Manuel Barla, que
coincidió con el técnico como jugador del Cádiz en los cuatro
primeros partidos de la temporada 1998-99 en Segunda B. Barla se
refirió al cese de Uribe como “situación desagradable”, pero
afirmando que era “necesario tomar la decisión por el bien del
Real Avilés”.
Ismael Díaz comenzó destacando
el componente sentimental de su llegada al club de la villa que
le vio nacer, señalando que “nací a 100 metros del Suárez
Puerta” y recordando a su padre comentando que “alguien ahí
arriba supongo que hoy estará dando palmas”.
Sobre la situación delicada de
su nuevo equipo, habló de “dinámicas en las que entra en juego
el aspecto mental”, pero “a los futbolistas no se les ha
olvidado jugar”. El técnico avilesino “no viene con una varita
mágica” y considera que “los entrenadores somos facilitadores de
circunstancias”. Incidió en varias ocasiones en el tema
psicológico, los futbolistas tienen que “creer en sí mismos” y
ellos son los que “nos van a sacar de esto”.
Díaz Galán, admirador del juego
de posesión al estilo del Barcelona, se ve al frente de una
plantilla con “grandes profesionales” y algunos “grandes amigos”
y pese a llevar un tiempo inactivo destacó que “el fútbol es mi
vida”, recordando los cursos que imparte y su amplia carrera en
Segunda B, con “dos títulos de liga en los grupos I y IV” y
“experiencia en todos los grupos excepto el catalán”.
Josu Uribe:
“A las 12 de la mañana ya sabía que no seguiría”
El ya ex entrenador blanquiazul
compareció por la tarde junto a su ayudante Fernando Rey,
“Cholo”, exponiendo en una extensa charla, con guión incluido,
sus sensaciones tras la destitución.
Comenzó destacando que ha sido
un “auténtico lujo y un orgullo poder pertenecer al club más
antiguo de Asturias” y que con un trabajo honesto se consiguió
dejar al Avilés en los puestos altos de la clasificación el
pasado año. Su “segundo” también se mostró agradecido en su
breve intervención y calificó como “aventura inolvidable” su
periplo junto a Josu al frente del equipo realavilesino.
No titubeó a la hora de
reconocer que “no había feeling” con los nuevos gestores y que
“el tiempo pondrá a cada uno en su sitio”, ahora el control es
de Clarkson y su equipo y ya se verá si su gestión es buena para
el club. Tampoco dudó en afirmar que tras la conflictiva rueda
de prensa tras el partido ante el Compostela, se situó “en el
disparadero”.
Al margen de los malos
resultados de los últimos dos meses, hizo referencia como “causa
de la destitución” a la supuesta filtración por su parte de la
decisión de la plantilla de no viajar en el día a Logroño y
costearse el alojamiento, añadiendo que se limitó a comunicar al
gerente la posibilidad de cambiar el plan de viaje. En relación
con este tema, Uribe afirmó que “a las 12 de la mañana del
domingo ya sabía que no iba a seguir”, una situación que no
había vivido nunca y que pese a todo no impidió que los suyos
hicieran un “partidazo”.
El técnico gijonés tuvo palabras
de agradecimiento para una larga lista de personas que han
trabajado en el Avilés, desde Chus Bravo a Vitorino Arias,
pasando por José Luis Rodríguez y Luis Cousillas y el personal
de diversas áreas que abandonó el club con la llegada del nuevo
grupo gestor, sin olvidar a delegados, preparadores físicos y
demás gente importante en el día a día.
Uribe se
marcha con la conciencia tranquila y destacó la dificultad del
último año, pues “hacer dos pretemporadas en una temporada es
muy exigente”. Concluyó respondiendo sobre el problema de la
lesión de Pascual, que finalmente deberá ser operado de una
rotura de menisco, afirmando que puso en duda su actitud y no su
posible lesión, cuando todavía no existía un diagnóstico claro.