El Entrego, que dominó la mayor parte del encuentro, consigue los tres puntos sobre la bocina a costa de un Astur muy disipado. 

El fútbol, a veces, es justo. Y hoy en el Hermanos Llana lo fue, aunque se hizo de rogar. Y es que El Entrego fue bastante más superior que su rival durante el transcurso del partido. Finalmente, sobre la bocina, consiguieron tres puntos de oro.

El partido solo tuvo un dominador, y precisamente no vestía de rojo. Desde el minuto uno El Entrego salió muy enchufado y rápidamente se apoderó del balón y maniató sin oposición alguna a un Astur muy vulnerable y sin ideas. El balón rondaba la portería local, solo fallaba el último pase. Sin embargo, con el paso de los minutos, el partido entró en barrena y se hicieron frecuentes las disputas en el medio del campo. Pero poco a poco otra vez los visitantes cogerían la batuta del partido para asestar la primera bofetada a los locales. A cinco minutos para el final del primer tiempo Borja Noval envía un gran centro al corazón del área, y Omar de cabeza adelantaba a los suyos. Era el cero a uno, y tras el gol, el descanso.

La segunda parte transcurrió por los mismos derroteros. Lejos de sobreponerse, el Astur seguía muy apagado y falto de ideas. Intentaba replegarse y salir a la contra por medio de sus extremos, pero El Entrego hoy estaba firme y bien posicionado y evitaba cualquier intento de peligro. Con el paso del tiempo, los visitantes se sentían más a gusto sobre el pasto y por medio de Borja Arguelles como referencia ofensiva buscaban la sentencia, aunque sin demasiada puntería. Sin embargo el Astur, como un moribundo en su lecho de muerte, tomó una buena bocanada de aire y por medio de Casielles que estuvo agudo al encontrarse la pelota que salió rechazada de una falta a balón parado igualaba la contienda. Quedaban nueve minutos y cualquier cosa podía pasar. Pero el fútbol, aunque no siempre, es justo y El Entrego lo merecía. Y cuando rondaba el noventa consiguió rascar un botín mayor. Diego Martín cabalgó la banda derecha y dentró del área, sin oposición, disparó aunque su chut fue repelido por el guardameta, pero Marcos muy atento dentro del área asestó la puñalada final.

Por consiguiente, tres puntos que saben a oro para un Entrego que toma aire en la zona media e iguala a puntos a un Astur que encadena con esta su segunda derrota consecutiva.