El líder liquida el encuentro con tres goles al filo del descanso, demostrando una efectividad asombrosa. Las decisiones arbitrales afectaron al transcurso del encuentro.

El Molinón acogió una lluvia de goles que viendo el juego de los equipos resultó exagerado y un tanto extraño en la forma de producirse. Como señalaron ambos entrenadores en sala de prensa, fue el típico partido con el que disfruta el espectador y no tanto los técnicos porque hubo errores defensivos evitables en ambos conjuntos y se concedió demasiado al rival para lo que estos equipos están acostumbrados.

El terreno de juego, los equipos e incluso el ambiente presagiaba que se vería un buen partido, disputado e igualado pero no fue así –si bien es verdad que hubo muchos goles, el choque quedó descompensado en 15 minutos donde el Racing sentenció el partido sin hacer demasiado para ello-. En los primeros minutos los locales salieron más metidos en el partido y llevando la iniciativa del juego ante un rival que esperaba con orden sin sufrir en exceso. Tanto Yacine como Bustos eran los hombres más verticales y tiraban desmarques que generaban inquietud a la defensa cántabra. Así, en el min. 16 llegó el 1-0 tras un balón que Yacine aguanta en la línea de fondo, Juanpe despeja defectuosamente y el balón le cae a Bustos en el pico derecho del área sacándose un latigazo seco, a media altura y por el palo corto que sorprendió a Sergio. Los siguientes minutos fueron igualados sin que ninguno se hiciera claramente con el dominio del juego ni generase ocasiones –practicamente no hubo porque cada llegada acabó en gol- aunque el Racing ya mostraba estar más asentado en el campo. En el min. 30 un centro del lateral Saúl que hizo un partidazo por la izquierda, no llegó a impactarlo Koné en el primer palo en disputa con Alain y llegó a Lafuente que se la encontró y le golpeó defectuosamente alojándose el balón en la red fuera del alcance de Dennis. En este último tramo de primera parte  estuvo el partido, ya que Pabló Peréz en el min.35 reclamó un penalti que no pareció desperdiciando una gran ocasión y en la jugada posterior si se pitó sobre Koné cuando encaraba a Meré, resbalando el central y tropezándose con él su rival lo que equivocaría a un desafortunado Ramos Domínguez que con esta decisión cambió el rumbo del encuentro ya que Javi Soria ponía el 1-2. Ni tiempo a asimilarlo tendría el filial gijonés, porque en el min.40 una gran conducción de Iñaki termina en la enésima subida de Saúl que pone un centro raso fantástico donde llega al segundo palo Koné para machacar el 1-3 y dejar a los locales prácticamente sentenciados. Por si no hubiera sido suficiente castigo, en el tiempo de prolongación, Zambrano pierde un balón absurdo en medio campo que recuperó Koné, éste abrió para Iñaki que entró por la izquierda en el área y disparó al primer palo donde Dennis solo pudo rechazar el esférico y Miguélez más atento que la despistada defensa rojiblanca se aprovechaba para poner el 1-4 y sentenciar el partido antes del descanso. Los asturianos no podían dar crédito a un resultado que viendo el juego parecía que tendría que ser mucho más parejo.

En la reanudación, Abelardo dejó a Zambrano en el banquillo para meter a Rachid pero no dio tiempo a entrar en el juego y a los 7 minutos, Mariano que acababa de entrar, en un nuevo centro de Saúl se anticipa a Dennis pero parece que apoyándose en él y establece el 1-5 que no debió subir al marcador y fue otro error importante del colegiado gallego.  3 minutos más tarde –en el 55 de partido- Yacine dio la réplica estableciendo el 2-5 con un buen remate de cabeza picado anticipándose a la defensa tras gran centro de Joni desde banda izquierda. Pero el partido ya estaba roto y ambos lo sabían, aparecieron los espacios y los cambios en ambos equipos, donde Paco Fernández puso de manifiesto que ya estaba pensando en el importante enfrentamiento ante el R. Oviedo ya que sustituyó tanto a Koné como a Javi Soria con mucho minutos por jugar. Abelardo también hizo lo mismo retirando a Pablo Pérez pero la tónica del encuentro ya no cambiaría porque la diferencia en el marcador lo hacía imposible. Pudo aumentar la cuenta los visitantes, en una internada de Iñaki por la derecha en el min.66 donde su pase de la muerte lo rechazó Alain quedando muerto el balón a la altura del punto de penalti para que Lafunte llegando desde atrás lo reventase contra el poste. El Sporting fundamentalmente llegaba por la izquierda con centros de Jony y tanto Alex García como sobre todo uno de Mera en el segundo palo pudieron marcar pero no tuvieron suerte en el remate. Aún quedaba un gol más por verse y fue de bella factura por medio de Yacine que hizo doblete y fue el mejor de su equipo tras un robo en la salida de balón a Javi Barrio que le permitió plantarse mano a mano con Sergio y cuando parecía que lo lógico era ceder para Alex García, hizo una finta con el cuerpo que dejó al cancerbero en el suelo entrando con el balón a puerta vacía. Aún tuvo el propio Alex oportunidad de marcar su gol en el descuento tras un gran centro de Alex Menéndez pero su cabezazo en inmejorable posición se fue fuera.

Por tanto más goles y errores que fútbol, donde el tirón en el tramo final del primer tiempo del líder resultó mortal de necesidad para el devenir del partido, dejando condicionado el resto del encuentro, que resultó festivo para el medio millar de aficionados llegados desde Santander y deja al líder en inmejorable posición respecto a sus rivales. Por su parte, la segunda derrota del filial sportinguista -excesiva y abultada- deja al equipo en mitad de la tabla sin más objetivo que conseguir la victoria que le resta para asegurar la permanencia y poder acabar la temporada tranquilamente.

ÁLBUM DE FOTOS

TIROS	A puerta		Fuera
	1ª parte	2ª parte	1ª parte	2ª parte
Real Sporting "B"	1	4	3	1
Racing de Santander	5	2	1	1

Abelardo Fernández	Paco Fernández