El Sporting se adelantó pronto con gol de Sergio, pero el Numancia con dos acciones a balón parado volteó el marcador. El gol de penalti de Scepovic inició un acoso y derribo rojiblanco sin premio. 22050 espectadores en El Molinón, mejor entrada de la temporada.

Los resultados de ayer y el ambiente del estadio rojiblanco invitaban al optimismo. Y el guión no pudo ser mejor en el inicio, ya que en el minuto 7 ya ganaba el Sporting. Córner de Nacho Cases botado a la frontal del área, que Sergio libre de marca, golpeó al fondo de la red. Gol de bella factura que hacía funcionar la pizarra de Sandoval. En 547 minutos quedó clavado el record de imbatibilidad de Biel Ribas. El arranque de los locales fue bueno. Posteriormente Cases disparó desde la frontal marchándose el esférico fuera. Pero el rival de esta tarde, el Numancia, tiene mucho peligro en las acciones a balón parado que siempre monopoliza Julio Álvarez. Y así empatarían en el minuto 15. Córner lanzado por el 10 numantino y Juanma en el primer palo remató de cabeza a gol. El empate desconcertó al Sporting que perdió el control del partido, llegando tarde a los balones divididos y sin conseguir trenzar acciones de peligro. El equipo soriano tuvo cerca el segundo con un saque de esquina cerrado de Julio Álvarez que Alberto despejó, sobre la línea, de puños. Dos minutos después fue Ripa el que lanzó fuera desde la frontal. La más clara del Numancia en la primera parte, a excepción del gol, llegó en el 35. Pase en profundidad sobre Vicente que disparó, despejando Alberto y el palo, el balón a córner.

La segunda parte el choque estuvo más igualado y con opciones para ambos en el arranque. La primera de la reanudación fue del Sporting con un pase de Scepovic que Fraile con el exterior, remató alto. La siguiente fue del Numancia, con un disparo de Vicente, muy escorado y alejado, que se estrelló en el palo. Más tarde fue Bernardo que tras un saque de esquina remató, despejando un defensa a córner. Pasaban los minutos con dominio alterno y empate en el marcador. Hasta que el Numancia volvió a golpear en una acción a balón parado. Córner de Julio Álvarez que Regalón de cabeza envió al fondo de la red. Se le ponía cuesta arriba el choque para los rojiblancos que no daban sensación de salvar al menos un punto. Sin embargo, un balón colgado al área fue controlado por Scepovic que en el interior del área fue más listo que los defensas y se cobró el penalti. El máximo goleador del Sporting fue el encargado de materializarlo y devolver las tablas al marcador. A partir de este gol el conjunto rojiblanco, en perfecta comunión con la grada, fue un vendaval. Atacó con todo y por todas las zonas ante un Numancia que se defendió como pudo. Scepovic envió fuera una cesión de cabeza de Lekic tras saque de banda de Luis Hernández. El propio lateral derecho tuvo una clarísima en el 86 tras una falta de Cases, pero remató demasiado alto. El partido se murió con un Sporting volcado que no pudo obtener el premio de la victoria.

Empate que deja un sabor agridulce. Por un lado el punto sirve para recortar distancias con Deportivo y Recreativo y mantenerlas con Eibar y Numancia. Por otro, no ganar en El Molinón, que presentó su mejor entrada de la temporada, deja la sensación de desaprovechar una gran ocasión. La próxima estación será el sábado a las 18:00 en el Nuevo Estadio de La Victoria ante el Jaén.