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El Oviedo "B" se la jugará en Luanco

Miércoles 14 de Agosto de 2013
Herminio García-Riaño
Fotos: Ángel C.
Oviedo

El filial se mostró un peldaño por encima del Luarca, que cayó derrotado con los goles del delantero luarqués, David. El sábado el desenlace en Luanco.

3 - 1
Real Oviedo B Luarca C.F.
Jugadores A R C G P Jugadores A R C G P
1 Marcos         1 1 José Ramón         1
2 Diegui         2 2 Efrén ©         2
3 Chapi ©         1 3 Labrado 53       2
4 Trabanco         2 4 Elián         1
5 Ángel     58   1 5 Jorge         2
6 Adrián     58   1 6 Fran     35   1
7 Omar     46 36 2 7 Adrián 70     57 2
8 Héctor         3 8 Carlos         1
9 Iván     46   2 9 Carlos Manuel         1
10 Ernesto     27   1 10 Cristian     78   1
11 Juan Steven     58   3 11 Mario     78   2
BANQUILLO BANQUILLO
12 Coutado     27   2 12 David Rojo     35   2
13 Adán (P.S.)           13 Aitor (P.S.)          
14 Belar     46   1 14 Marcos     78   2
15 Miki     58   2 15 Álvaro     78   1
16 Raúl     58   1 16 Torres          
17 Pelayo     58   1 17            
18 David     46 66/74 2 18            
ENTRENADOR ENTRENADOR
Iván Palacios Pablo Villar
Goles: 1-0 m. 36 Omar; 1-1 m. 57 Adrián; 2-1 m. 66 David (p.); 3-1 m. 74 David.
Árbitro: Delgado Fernández, asistido por Valdés y Barriga Morente. Delegación de Avilés. (2)
Incidencias: Unos 100 espectadores en el campo nº 1 del Requexón, césped en buen estado.

El filial carbayón y el Luarca de Pablo Villar pusieron en escena en el Requexón la que sería última aparición de los de La Veigona en el torneo este año, dejando en el aire (pero muy en el aire) el pase a semifinales de los de Iván Palacios, plaza que de momento tiene atada, y bien atada, el Marino de Luanco.

Lo que Vetusta y Luarca dejaron ver hoy en el Requexón, es que el filial del Real Oviedo está un peldaño por encima en preparación física, pero también en el juego. Con Diegui de nuevo en el lateral derecho -llevando a Chapi al carril izquierdo- asociado con un desbordante Juan Steven y con las ayudas constantes de Iván, la banda derecha del ataque azul fue una pesadilla para el Luarca, y foco de las principales jugadas de peligro del partido.

Frente al juego combinativo del filial carbayón, con un Héctor (una vez más) soberbio en la organización del juego junto con Adrián, el Luarca esperaba agazapado uno o dos metros por detrás, sin presionar la salida de balón del rival; ello hizo que el trabajo de Trabanco y Ángel (Miki en la segunda parte) sacando el balón hacia posiciones de ataque fuese más cómodo. Por contra, la misma salida de balón del Luarca se veía ya dificultada por la presión constante de hombres como Iván, Juan, Omar o David (éste último en la segunda parte). La distancia que parece separar a ambos conjuntos se veía ya, pues, desde el momento en que ambos porteros ponían el balón en juego.

Por su parte, el Luarca buscaba profundidad con la ayuda de los laterales Efrén y Labrado desde la retaguardia, ambos a un muy buen nivel, y con el trabajo a destajo de un incisivo Adrián, autor de un soberbio gol y receptor de una amonestación quizás algo rigurosa. Pero en general, el centro del campo tenía el sello de los locales, y las llegadas de los de Villar se daban con cuentagotas. La salida de David Rojo, (reciente fichaje para La Veigona procedente del Mosconia) sustituyendo a Fran, dio otro aire al juego del Luarca. Rojo se convirtió en referencia constante de sus compañeros, y en el medio centro que movió el juego del equipo con más criterio.

Pero los ataques del Luarca, los pocos que llegaban al área local, se encontraban con una defensa que no daba resquicio alguno. En todo momento Trabanco y Ángel por el centro, Diegui y Chapi por bandas, dejaban las internadas de Carlos, Adrián o Mario en meras aproximaciones; y tras cortar el filial en defensa los tímidos ataques visitantes, las salidas como rayos de jugadores como Diegui, Iván y Juan Steven hacían trabajar duro a la retaguardia del Luarca. Un extremo como Mario, tenía que emplearse a fondo y bajar a ayudar (muy bien por cierto) en labores defensivas, con la dificultad añadida del cambio de posiciones entre Juan Steven e Iván, ambos con una movilidad endiablada.

Así las cosas, llegamos al cuarto de hora final del primer tiempo, y en una jugada iniciada por Coutado (había sustituido a Ernesto, lesionado) con pase a Chapi, el balón llega a Omar; el atacante carbayón se interna en el área con aparente facilidad, y de un potente disparo de abajo a arriba bate a José Ramón. Solo dos minutos tardaron los de La Veigona en avisar de que no venían de paseo, y en un saque de falta desde la banda izquierda del ataque, Marcos tuvo que emplearse a fondo frente a varios atacantes del Luarca para no sacar el balón de la red.

La segunda parte comenzó con varios avisos más de los de Pablo Villar. Al minuto de la reanudación, una internada de Adrián por banda derecha acabó con un fuerte tiro cruzado que salió alto, y dos minutos después, una falta sacada por Rojo salió fuera por poco. Eran avisos del empate que llegaría poco después.

Mientras tanto, Iván Palacios había dado entrada a David y Belar, dos hombres de ataque, por Iván y Omar. Y la movilidad de ambos unida al cambio de banda de Juan Steven (que pasó a jugar por la izquierda hasta ser sustituido) trajo en jaque a la defensa visitante. David sería el autor de dos de los goles, pero un primer tanto a pase de un soberbio Héctor suyo sería anulado por fuera de juego en el minuto 55. Un minuto después, respondió Efrén en labores de ataque con un disparo que pegó en el poste y salió fuera, cuando se cantaba el gol en las gradas.

Este aviso de Efrén dio paso al empate del Luarca. Una preciosa volea por banda derecha del ataque visitante desde la esquina del área, se coló sin remisión por el palo contrario de la meta carbayona. El autor de este gran gol, Adrián. El minuto, 67.

El empate pareció bajar los ánimos de la escuadra carbayona y dárselos a los hombres de Villar, que pasaron a controlar el juego en el centro con más intentos de llegadas, acabando la mayoría de ellas en las botas de la defensa del Oviedo. Y así transcurrieron las cosas hasta el minuto 21 de la segunda parte: penalty claro por derribo al delantero azul David, transformado por él mismo y volviendo a poner al filial por delante en el marcador.

El propio David lo siguió intentando con jugadas y aproximaciones de peligro, ayudado desde atrás por el genio de jugadores como Coutado o Hector, que con sus destellos de calidad ven y "leen" el juego como pocos. Y así, en el minuto 74, un pase genial de Héctor al hueco encontró a David, y su internada en el área y disparo llevaron el 3-1 ya definitivo al marcador.

Poco más iba a ofrecer este partido ya hasta el final, salvo una jugada de ataque del propio Hector que desbarató José Ramón en una gran salida cumplido ya el minuto 90. Una victoria merecida del Real Oviedo B, que apurará sus últimas opciones de meterse en semifinales de Copa Federación en Miramar. Pero el reto es difícil, ganar a los de Quirós por más de un gol en su propio campo, es la única forma de "quitarle" al Marino un pase que tiene casi en el bolsillo.

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