Fiesta incompleta de un Real Avilés B que certificó su ascenso a Tercera en un encuentro que se disputó en el Román Suárez Puerta, donde los locales no consiguieron completar la fiesta con una victoria por culpa de un bregador Turón.

La primera parte fue muy disputada por parte de ambos equipos. El conjunto local buscaba combinar rápido y dar muestra de la pegada con la que cuentan, pero un trabajador Turón replegaba rápido y buscaba balones largos a la contra que pudieran hacer daño. Sólo un par de ocasiones para cada conjunto en este periodo, siendo la más clara un balón largo de Rony a Chini que lo deja solo delante del portero, pero el 7 blanquiazul manda desviado cuando se cantaba el gol.

Al descanso se regó el campo, que estaba algo seco, para darle más velocidad al juego e intentar favorecer el juego rápido del equipo local.

Salió con ganas el Real Avilés B en este segundo periodo, con dos ocasiones en los primeros 5 minutos, una de ellas se fue lamiendo el larguero. Contestó acto seguido el conjunto visitante con un buen pase interior de Álvaro para Carlos, pero el portero local achica y atrapa el balón.

El Avilés sigue apretando y en una jugada embarullada en el área se producen varios remates a puerta que son repelidos por el portero o defensas visitantes hasta que Guille manda alto. Tras esta confusa jugada disfruta el Turón de su ocasión más clara de gol, un gran pase de Álvaro para Morilla, este último dispara y obliga a una buena estirada de José Luis y posterior despeje de la defensa.

Tras estos primeros veinte minutos de ritmo vertiginoso, el partido decae de ritmo y se vuelve soso y aburrido. No será hasta a falta de diez minutos para el final que vuelve a coger velocidad e incertidumbre, todo a partir del gol de Cristian en el minuto ochenta tras una buena combinación entre Guille, y Piquero que termina con un centro del lateral izquierdo al segundo palo donde el delantero, que se encontraba solo, remata de cabeza.

Después del gol el conjunto local dispone de dos buenas ocasiones de gol en botas de Samu y Chini, pero dos buenas intervenciones del portero visitante, Juan, dejan a ambos jugadores con la miel en los labios. Y el Avilés pasa de poder sentenciar el encuentro a encontrarse con un empate inesperado, merced de un penalti en una acción en la que no se apreció nada punible. La pena máxima fue transformada por Moncas, que puso el resultado final en el marcador.

Reseñar que al final del partido hubo una tangana debido a una entrada de Iván Meana sobre Edu en el mismo instante en que el árbitro pitaba el final. Tras varios agarrones y empujones la cosa no fue a más, pero el árbitro expulso a Pelayo G. y a Álvaro por cartulina roja directa.

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