El Muros se llevó los tres puntos del Luis Oliver en un partido con muy pocas ocasiones, que decidió el gol de Romero y la parada de un penalti de Rubén Llosa a Pablo Díez en el 97'.

Duelo directo entre dos aspirantes al ascenso a Tercera División, que cogía más interés tras la derrota del Andés en la tarde de ayer.

El Pumarín contaba con las bajas de dos titulares habituales por sanción, el defensa David y el mediocentro Christian, retornando Jairo al once inicial tras cumplir los cuatro partidos de sanción. El Muros tenía las bajas de Sergio y Coke.

El respeto fue la tónica predominante del encuentro, con dos equipos que practican habitualmente un juego directo y que fue poco efectivo en el día de hoy. El Muros llevó ligeramente la iniciativa, aunque la única ocasión en este primer tiempo fue el gol, que llegó tras un pase magistral de Sergio que cabeceó libre de marca Romero al segundo palo batiendo a Miki.

En la reanudación salió con más mordiente el Pumarín, buscando a Pablo Díez y Marcos con balones largos, aunque siempre con toda la ventaja para los centrales visitantes. Tras quince minutos de empuje local el Muros se repuso y no concedió llegadas a su área, disponiendo de una buena ocasión para sentenciar el encuentro en el minuto 77, con un pase atrás de Pajín a la frontal que Pinto remató alto.

Los pumas no tenía recursos para llegar al área del Muros y los visitantes comenzaron a parar el partido para hacer valer su renta. Cuatro cambios con el tiempo cumplido, más una pérdida de tiempo del meta Rubén Llosa llevaron al colegiado a añadir 7 minutos, justo cuando un balón cabeceado en el área lo toca con el codo Edu y señala la pena máxima expulsando por doble amonestación al defensa del Muros. Pablo Díez asumió la responsabilidad como habitualmente y lo lanzó abajo a su izquierda, encontrándose con una buena parada de Rubén Llosa, que significaba a la vez el final del partido y los tres puntos volaban para Muros.

En los instantes previos al lanzamiento, Sergio, ya sustituido, lanzó una botella de agua al terreno de juego, algo que recogió el colegiado en el acta. Los jugadores del Muros celebraron con su afición -casi mayoría en la grada- la victoria que les permite soñar con el ascenso a Tercera, donde el técnico, Pelayo Marqués, no podría entrenar al no tener titulación. El Pumarín pierde una ocasión de oro para situarse en la tercera plaza.

Escasa afluencia de público

Apenas 60 personas se dieron cita en el Luis Oliver, una cifra alcanzada gracias al desplazamiento de algo más de 20 seguidores del Muros. La coincidencia con el partido del Real Oviedo influyó en esta floja entrada.

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