Desastre en Mareo

Un Sporting desdibujado, un rival ordenado, serio y bien plantado y una nefasta actuación arbitral provocan la segunda goleada en contra seguida del filial rojiblanco.

No iba a ser hoy la mañana de los chicos de Abelardo en ningún sentido, ya que ni tuvieron su día ni les acompañó ninguna del resto de circunstancias que rodean un partido donde sobraron los últimos 30 minutos cuando parecía a priori sería igualado, y en eso andaba al partido hasta el descanso al que se llegó con el empate inicial en el marcador. La clave del choque estuvo en los 15 primeros minutos del segundo acto donde el equipo salmantino consiguió marcar dos goles y los locales ya se encontraban con un jugador menos, lo cual dejaba el partido visto para sentencia. De ahí al final, festival chacinero y un equipo rojiblanco que se desangraba y pedía a gritos que terminase la agonía cuando primero, puesto que no tenía opción alguna de hacer nada en el partido.

Comenzaba el encuentro con sorpresas respecto a lo previsto en la alineación local, ya que Ayala era titular en la portería por delante de Dennis y Meré entró en el centro de la defensa provocando que Alain jugase en el pivote cuando parecía que Zambrano podía recuperar hoy la titularidad ante la baja de Guitián. En los primeros 10 minutos si se vio a un Sporting que quería mandar en el juego, apretar arriba y darle velocidad a la pelota, pero fue un espejismo ya que los visitantes se fueron asentando, ganando terreno y mostrándose cada vez más dominadores con el paso de los minutos. No había ocasiones para ninguno de los 2 equipos pero ya Oscar Valero en un balón a la espalda de los centrales creo indecisión e inseguridad a la zaga asturiana. Chuchi –el mejor sobre el césped- manejaba el partido sin que el Sporting viera la forma de hacer daño a las inmediaciones de Wilfred salvo en alguna acción esporádica de Castro que ganaba en velocidad a la defensa. Y es que cuando Joni no tiene su día, como hoy, a los rojiblancos en ataque se le apagan las luces en ataque. En el min.31 Manu Moreira tuvo que sustituir a Carlos Rubén que no se pudo recuperar del golpe que le dio Benito y que supuso la 1 de las 2 amarillas y consiguiente expulsión que vio en el encuentro. Así fueron pasando los minutos, donde los locales estaban cada vez mas incómodos pero sin sufrir en exceso hasta que en el min.43 de partido el árbitro cometió su primer error grave al adjudicar a Benito una falta al borde del área que había cometido Julio y que provocaba la expulsión del lateral. Esta circunstancia ya condicionaba al equipo local y por ello Abelardo en el descanso dio entrada a Sergio Menéndez en lugar de Carlos Castro para equilibrar al equipo. No dio ni tiempo porque a los 2 minutos de la reanudación un gran pase de Chuchi entre líneas dejó solo a Pino que cogió bien la espalada de Meré y batió por abajo a Ayala que pudo hacer algo más.

No dio tiempo a reponerse del golpe, y 3 minutos más tarde –en el min.50 de partido- se produjo la acción que condicionó el resto del choque: Ayala sale a coger un balón, lo atrapa y cuando está levantado Gago le toca el balón por detrás saliendo este rebotado y permitiendo que Pino marcase a placer. La reacción de los chicos de Abelardo solo supuso tarjetas –tanto Ayala como Joni la vieron por diferentes protestas- y la del público de Mareo un constante abucheo a un Iglesias Villanueva que no tuvo su día y que perjudicó gravemente a los asturianos. A partir de ese momento, fue coser y cantar para los chacineros que jugaron lo que resta de partido a placer ante un rival que ya bajó los brazos y al que no le salía nada.  Abelardo reaccionó dando entrada a Zambrano y Alex García por Alain y Guillermo pero nada cambió y la ocasión local más clara la tuvo Yacine con un tiro que le sacaron a puerta vacía pero ya estaba anulada la jugada. En el min. 68 Chuchi redondeó su gran partido con un zurdazo colocado a pase desde la izquierda de Manu Moreira que ponía el 0-3. Ante el aturdimiento local, Julio en el min.72 regala un balón en el área a Óscar Valero que cruza el balón con la puntera para el 0-4. Posteriormente caería el quinto y por tanto la manita, en el min.84 con un gol de Rubén llegando desde atrás en área chica a un centro desde la derecha de Gago. Entre medias nada reseñable porque estaba ya todo decidido a favor de los salmantinos.

Por tanto, duro golpe para los gijoneses que encadenan dos goleadas seguidas en contra y que dejan una preocupante imagen colocándose en puesto de promoción de descenso, si bien es cierto que hoy el colegiado colaboró con su mala actuación a una derrota tan abultada y dolorosa.

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