El Lealtad enlaza su segunda derrota consecutiva, ofreciendo muy buena imagen ante un Tuilla, cuya superioridad no fue ni mucho menos aplastante, como al final reflejó el marcador.

El choque tuvo un tiempo para cada bando: el inicial para el Tuilla y la reanudación para los locales.

De entrada , los locales cedieron terreno y los arlequinados manejaron con solvencia la situación al gozar de espacios y adueñarse de la parcela central porque los de Juan Prado con un planteamiento conservador dejaron toda la iniciativa a su oponente , lo que originaba aproximaciones inquietantes a las inmediaciones de Javi Porrón, en una de ellas, Matías se giró para acomodar el balón y de fuerte disparo batió la meta negrilla inaugurando la cuenta. Los maliayeses cimentaban su juego en balones largos a Robi que muy aislado y en inferioridad numérica era incapaz de controlarlos, la pareja de baile de Robi en la vanguardia, era Villanueva que también se mostró desdibujado en esta fase. Con un Lealtad muy fracturado por la separación entre sus líneas , su rival se encontraba cómodo y  una arrancada personal de Emilio, atisbaría el incremento de renta para sus intereses, al terminar en penalty por derribo de Borja que traduciría Leiras en el 0-2.

Al filo del descanso , Laviana sacó su calidad a relucir desbaratando una intentona envenenada del bando local.

A la salida de vestuarios, el desgaste corrió a cargo local con gran empeño en meterse de nuevo en el partido y fabricó dos opciones muy meritorias que el cancerbero Laviana abortó con seguridad.

El Tuilla sólo quería una contra para matar el encuentro y está la gestó en el 80 culminada con un zurdazo de Víctor Robles. El orgullo maliayo emergió con el tiempo cumplido para maquillar el resultado en una obra sublime de Villanueva que tras eludir a dos contrarios dentro del área grande materializó con un disparo cruzado.

En suma , El Lealtad no puede con los equipos de arriba, pero al menos se muestra como un bloque trabajado y que no arroja la toalla. Por su parte el Tuilla encarriló muy pronto el choque e hizo lo justo para conservar esa ventaja y asegurarse la victoria.