Un Real Madrid “C” sumamente eficaz infringió una severa y dolorosa derrota al  Avilés, que sigue inmerso en una racha negativa que le aleja cada vez más de la zona alta.

Empezaron bien los locales, durante el primer cuarto de hora el segundo filial madridista apenas pasó del centro del campo y eran los avilesinos quienes buscaban el gol, tratando de aprovechar las bandas, en especial la izquierda, con Abraham muy activo. Otro de los motores ofensivos del equipo fue Gerardo, que tuvo la oportunidad más clara en el minuto once, aunque su suave golpeo fue detenido hábilmente por Rubén Yáñez. 

Los visitantes dieron un tímido aviso con un disparo lejano desviado de Ramírez superados los 15 minutos y fue en el 23 cuando llegó la primera estocada; Raúl De Tomás peinaba de cabeza y la pelota le caía a Burgui, que con una gran volea con la izquierda convertía en gol la primera ocasión de los suyos. El Avilés quedó noqueado tras el gol y apenas volvió a inquietar a la ordenada defensa madridista durante la primera mitad, únicamente cabría destacar un centro del debutante Jony que no encontró rematador, el centrocampista ocupó la posición de lateral izquierdo y se mostró algo nervioso y precipitado –se echa de menos a Álex Cruz en esa demarcación casi tanto como a Juan Díaz en el medio-. 

Los jóvenes discípulos de Manolo Díaz, sin hacer nada del otro mundo, se fueron soltando en ataque y trataron de aprovechar su calidad para ampliar la ventaja. El juego entre líneas de Ramírez y la velocidad de Bruno por la derecha fueron sus principales armas, aunque tampoco sirvieron para crear ocasiones claras; la segunda prueba de la pegada “merengue” llegó en el minuto 42, una falta cometida sobre De Tomás en la frontal del área la clavaba Ramírez sorprendiendo a un descolocado David, que llegó a tocar el cuero pero no pudo evitar el gol. 

La segunda parte comenzó como la primera para los locales, con otro jarro de agua fría; una dudosa falta cometida de nuevo sobre De Tomás –que se pasó medio partido en el suelo- era ejecutada por el lateral izquierdo Javi Noblejas, el balón golpeó en la barrera despistando al portero avilesino y el partido parecía visto para sentencia con poco más de 40 minutos por jugarse. 

El intento de reacción de Chiqui de Paz no se hizo esperar, Miguel entraba por un inoperante Ito y Aitor se abría a la izquierda, dejando a Gerardo como acompañante de Borja en el medio; Abraham cambió de banda y volvió a ser el mayor incordio para la defensa rival. La remontada esta vez se tornaba casi imposible, lo intentó Naya con un cabezazo que se fue alto en el 50 y diez minutos después el propio Abraham recibía un buen servicio de Miguel pero Rubén impedía el gol. 

El Madrid “C” se limitó a contemporizar, el cambio de Álvaro López por Ramírez dejaba claro que los blancos –esta vez de verde oscuro- se iban a limitar a controlar en defensa y buscar alguna contra; pudieron ampliar su cuenta con una jugada personal del recién ingresado Mariano, que estrelló su disparo en la cepa del poste, y un tiro desde la frontal de Burgui despejado por Davo. Corría el minuto 71 y estábamos en plenos “minutos de la basura”, el Avilés no bajó los brazos pero su bagaje se limitó a un nuevo intento de Abraham con la izquierda en el 76 y un par de chuts lejanos de Borja Prieto, en una tarde aciaga en la que ni siquiera llegó el “gol del honor”.  

Para colmo Burgui puso la puntilla en el 90, el contundente y excesivo 0-4 subía al marcador merced a un tiro cruzado del “11” madridista que ponía fin al partido. Todo un varapalo para los jugadores avilesinos, que terminaron desolados aunque recibiendo el consuelo de buena parte de la afición en forma de aplausos, unos ánimos que deben contribuir a que la moral no decaiga para tratar de recuperar cuanto antes las sensaciones positivas del primer tramo de la temporada.

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