El
Real Avilés pone fin al año
en el que la afición
blanquiazul recuperó la
ilusión por un equipo que
vivió primero el fracaso y
posteriormente saboreó las
mieles del éxito tras
adaptarse de la mejor manera
posible a una categoría
conseguida en los despachos,
después de no haberla podido
alcanzar en el terreno de
juego.
Pugna fallida por el
liderato de Tercera
A comienzos del año 2012, el
Real Avilés vivía el apogeo
de su lucha contra el Caudal
de Mieres por la primera
posición en Tercera
División. Tras la llegada
del grupo Golplus, en el
verano anterior, el conjunto
avilesino había recuperado
su camino, olvidado desde
hacía casi un década, que no
era otro que el de luchar
por retornar a la división
de bronce. Los
blanquiazules, tras un mal
inicio de Liga, habían
conseguido recuperar el
terreno perdido con los de
Mieres, líderes de la
categoría, y el 14 de enero
se presentaba la ocasión
para asaltar el liderato.
Solamente dos puntos
separaban a ambos equipos
pero una derrota en el
Hermanos Antuña alejó a los
de Bango de su objetivo de
quedar primeros, lo que
supuso un “hándicap” en la
lucha por el ascenso, que,
sin el campeonato, se ponía
más cuesta arriba.
Fracaso ante el Coria en la
lucha por el ascenso
A
pesar de algunos tropiezos
posteriores del equipo de
Paco Fernández, el Real
Avilés no volvió a tener tan
cerca la ocasión de asaltar
el liderato y se tuvo que
conformar con la segunda
plaza al finalizar la Liga
regular. Esto suponía que en
lugar de jugar una
eliminatoria para ascender,
los blanquiazules tendrían
que disputar tres rondas
para lograr el ansiado
retorno a Segunda B. El
bombo finalmente deparó que
los avilesinos tendrían que
viajar a Sevilla para librar
su primera batalla. El Coria
del Río sería el rival. El
hermanamiento entre ambas
aficiones fue increíble
durante las dos semanas que
duró la eliminatoria, pero
en el terreno de juego
comenzaba la guerra y los
avilesinos, con Ricardo
Bango como “comandante”, no
fueron capaces salir airosos
del choque y quedaron
eliminados tras no perder,
pero tampoco ganar (0-0
fuera y 2-2 en casa), en
ninguno de los dos
encuentros, a pesar de
partir como claros
favoritos.
El adiós de Bango y la
compra de plaza en Segunda B
El primer proyecto de
Golplus fracasaba y las
miradas se centraban tras el
no ascenso en dos frentes,
el entrenador y la
posibilidad de ascender en
los despachos. Por un lado
el segundo de abordo de
Ricardo Bango, el gijonés
Chiqui de Paz, tomaba la
alternativa en el banquillo.
Por otro, el Director
General del Real Avilés,
José Luis Rodríguez,
terminaba corroborando que
el Real Avilés pugnaría por
adquirir una plaza en
Segunda B. Tras varias
semanas de noticias
contradictorias, sobre si el
Real Avilés tenía o no
posibilidades de
conseguirlo, el 6 de julio
la RFEF comunicaba la
decisión al Avilés, el
conjunto blanquiazul
regresaba a Segunda B ocho
años después, previo pago de
190.000 euros. Chiqui de Paz
tomaría los mandos del
equipo para entrenar en
Segunda B.
Planificación deportiva tras
el ascenso en los despachos
En
las semanas de incertidumbre
sobre si el equipo iba a
competir en Segunda B o
Tercera, la planificación
deportiva no se estancó. El
Real Avilés había cerrado la
contratación de Manu Blanco
y de Hermes, dos jugadores
fichados para jugar en
Tercera que, posteriormente,
abandonarían el equipo al
final de la pretemporada ya
que el conjunto avilesino
necesitaba huecos libres
para reforzarse con el fin
de alcanzar cotas más altas.
A lo largo del mercado
veraniego llegaron Rebollo,
Gerardo, Aitor Tornavaca y
Geni. Jugadores con renombre
y experiencia tanto en
Segunda B como en otras
categorías superiores. A
pesar del peso que tenía en
cuanto nombres el equipo, la
primera toma de contacto
sobre el campo no fue
satisfactoria. El conjunto
avilesino caía, un año más,
en la primera ronda de la
Copa Federación tras no
poder con el Langreo.
Tampoco salieron bien las
cosas en el debut liguero,
en el que los avilesinos
cayeron derrotados en casa
(0-2) ante el Real Oviedo.
El equipo se asienta en la
categoría y se convierte en
la revelación de la primera
vuelta
Las dudas en un equipo con
una edad media avanzada
comenzaban a surgir. Antes
del cierre del mercado de
fichajes se incorporarían
dos jugadores más para
suplir las bajas de Manu
Blanco y Hermes; Álex Cruz y
Jorge Rodríguez. El equipo
de Chiqui de Paz alejó los
fantasmas de la forma más
rápida posible, venciendo
contundentemente (1-4) en la
segunda jornada ante el
Zamora. Comenzaba entonces
una racha triunfal que
elevaría a los avilesinos a
la categoría de equipo
revelación del campeonato
llegando, incluso, a
alcanzar el liderato tras
vencer al Marino de Luanco
(0-1) en la jornada 16. Un
primer puesto que
posteriormente se perdería
tras caer (1-3) ante el
Caudal en el siguiente
partido. El conjunto de
Chiqui de Paz, finalmente,
cierra 2012 en la tercera
posición a un punto del
líder, cuatro por encima del
quinto clasificado y con un
colchón de 13 puntos sobre
el descenso. Todo esto
logrado, además,
aprovechando la competición
para dar la alternativa en
el primer equipo a jugadores
del filial como Ito,
Cristian García o el andaluz
Cristian Sánchez, que
gozaron de minutos en la
primera vuelta.
El conjunto realavilesino se
come las uvas tras adaptarse
de la mejor manera posible a
una categoría en la que no
competía desde el año 2004.
El reto para el año entrante
será creerse, con la
permanencia casi hecha, que
en el mes de mayo el equipo
puede estar de nuevo
presente en un sorteo de
´playoff´ en la Ciudad de
Fútbol de las Rozas.