El Sporting vuelve a tirar una oportunidad de oro para meterse en la lucha por la salvación ante los suplentes del Alavés. Errores infantiles, falta de fútbol, dos penaltis en contra...demasiados contratiempos. Se estrenó Traoré con gol y Castro firmó el 2-4 definitivo.

2						-		4
Real Sporting de Gijón							Deportivo Alavés
Nº	Jugadores	A	R	C	G	P	Nº	Jugadores	A	R	C	G	P
1	Cuéllar	68				2	1	Pacheco					2
16	Lillo					1	22	Vigaray					2
4	Meré					1	4	Alexis				85	3
5	Amorebieta	68				1	24	Zou Feddal					3
15	Canella			70		1	3	Raúl García					2
22	Vesga	39				2	16	Daniel Torres					3
17	Afif	43		46		1	23	Krsticic	22				2
19	Carmona	71				2	25	Katai	20		65		3
10	Nacho Cases	75				2	7	Rubén Sobrino			79	10	3
18	Isma López					2	17	Edgar				70	3
24	Cop			61		2	9	Santos	45		67	57	2
BANQUILLO							BANQUILLO
13	Mariño (p.s.)						13	Ortolá (p.s.)
6	Sergio Álvarez						5	Laguardia
8	Traoré	75		70	83	3	6	Marcos Llorente
9	Carlos Castro			61	90	3	10	Romero			65		3
14	Burgui			46		2	19	Manu García			79		s.c.
23	Moi Gómez						20	Deyverson			67		2
29	Juan Rodríguez						21	Kiko Femenía
ENTRENADOR							ENTRENADOR
Joan Francesc Ferrer "Rubi"							Mauricio Pellegrino
Goles:		0-1: m 10 Rubén Sobrino; 0-2: m 57 Santos (p); 0-3: m 70 Edgar (p); 1-3: m 83 Traoré; 1-4: m 85 Alexis; 2-4: m 90 Carlos Castro.
Árbitro:		Gil Manzano del Cómite Extremeño (2). Asistido en las bandas por Nevado Rodríguez y Martínez Nicolás.
Incidencias:		Tarde con lluvia intermitente y viento en Gijón. 21.752 espectadores en El Molinón, con presencia de unos 200 aficionados del Alavés. El árbitro recogió en el acta el lanzamiento de una botella de plástico con agua al terreno de juego y de una moneda que impactó en el asistente.

Ganar, ganar y volver a ganar. Ese era el lema para un partido que era fundamental para los intereses locales. Y que lejos estuvo el Sporting de llevar a la práctica lo citado al iniciar el párrafo.

Rubi introdujo cuatro cambios respecto al choque ante el Athletic. Meré suplió al lesionado Babin, Vesga a Xavi Torres, Nacho Cases a Viguera y Afif a Víctor Rodríguez. Precisamente Xavi Torres fue el futbolista descartado a última hora, al igual que el tercer portero Whalley. Por su parte Pellegrino refrescó a su equipo tras el enorme esfuerzo realizado el jueves en Vigo con motivo de la ida de las semifinales de la Copa del Rey. Solo repitieron dos hombres: el portero Pacheco y el central Feddal.

La intención del Sporting fue de presionar y de buscar la portería de Pacheco. Pero una vez más, un gol tempranero en contra echó por tierra todo lo preparado y dejó aún más tocado a un equipo ya muy hundido. Una contra del Alavés se convirtió en el 0-1. Katai se fue de Canella y puso un balón al espacio para que Sobrino, tras ganar la espalda de Amorebieta y Meré y superar la carga del segundo, se plantó ante Cuéllar al que batió con un disparo cruzado. Y pudo ser peor, ya que a renglón seguido Edgar volvió a plantarse ante el portero extremeño, que esta vez consiguió evitar el tanto.

El Sporting es un equipo que hoy en día va muy justo en lo que a fútbol y confianza se refiere. Cada mazazo es una palada de tierra encima más, y los argumentos escasean. Y como prueba es los minutos que transcurrieron hasta el descanso. Acercamientos con raza, centros al área, balones directos...pero sin disparar a puerta y sin inquietar al Alavés.

Rubi no tardó en mover el banquillo. Al descanso suplió a un desacertado Afif por Burgui. Sorprendió que colocara al extremeño en banda izquierda, colocando al otrora lateral izquierdo, Isma López, como extremo diestro. El arranque del Sporting volvió a ser esperanzador. El equipo empujaba y merodeaba la portería de Pacheco. A punto estuvo de cantarse gol con un centro raso de Canella que se paseó por el área pequeña sin encontrar rematador.  Pero como sucediera en el primer tiempo, otro error evitable y otro gol en contra. Meré se fue al suelo en un balón intrascendente y derribó a Vigaray en el interior del área. Santos ejecutó y batió a Cuéllar, que adivinó la dirección pero no pudo detener el disparo.

Con el 0-2 el partido prácticamente quedó visto para sentencia. El rosario de goles en los últimos 20 minutos, 4, fueron fruto de dos equipos volcados en ataque y con pocas atenciones en defensa. Con Lacina Traoré a punto de debutar, llegó el 0-3. Otro penalti innecesario y evitable. En esta ocasión lo cometió Amorebieta, que sacó el brazo a pasear y golpeó a Dayverson tras un saque de banda. En esta ocasión, lo transformó Edgar, chutando fuerte al centro.

Con la entrada de Traoré, el Sporting insistió en balones directos sobre el punta, que se las arreglaba para mejorar la acción tras su intervención. Su participación es de las pocas cosas a las que puede agarrarse la afición rojiblanca. Solo tardó 13 minutos en marcar su primer gol con su nueva camiseta. El ariete costamarfileño aprovechó un pase de Nacho Cases para batir a Pacheco. Casi sin tiempo de poder ir a por el segundo y así meterse definitivamente en el partido, llegó el 1-4. Otra acción terriblemente mal defendida, que acabó con un cabezazo de Alexis libre de marca a centro desde la derecha de Romero. El paraguayo, nuevo fichaje de los babazorros, había avisado con un lanzamiento de falta escorada que Cuéllar despejó. Habría tiempo para un gol más, en este caso de los locales. Buena acción individual de Carlos Castro, que finalizó con un disparo raso con la zurda para firmar el definitivo 2-4.

El Sporting se desangra con errores defensivos infantiles y evitables. El equipo desaprovecha una oportunidad de oro para meterse de lleno en la lucha por la salvación. Da la sensación, que queda una bala y esa bala pasa por ganar al Leganés el próximo domingo a las 16:15h. A día de hoy el conjunto madrileño distancia en cinco a los asturianos. Ganar sería meterse a distancia de un partido y conseguir el golavaraje particular. Pero para ello hay que ganar, algo que no se consigue desde el 4 de Diciembre.

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