Seguro que todos hemos
recurrido a las posesiones
como recurso en el trabajo
cotidiano.
Los ejercicios de
posesiones, entendidos como
aquellos en los que no hay
un objetivo de gol en su
desarrollo sino un
mantenimiento de la pelota,
han supuesto un eslabón de
trabajo vital por sus
múltiples beneficios,
algunos de los cuales
compartiremos en las
siguientes líneas para
finalizar con un puñado de
ejemplos.
El recurso metodológico de
las posesiones presenta
múltiples ventajas a nivel
táctico y físico. Hablemos
de ellas valorando una serie
de aspectos de cara al
diseño de actividades:
Variables para el diseño de
posesiones
A nivel de
ESPACIO
Generalmente se trabajan en
espacios no muy amplios esto
hace que el trabajo
físico tenga una mayor
dosis de explosividad,
velocidad corta y
rectificaciones.
A nivel táctico la creación
de líneas de pase, el
aprovechamiento de espacios
y la salida jugada en ese
terreno limitado se
presentan como clave.
Pero esto no siempre debe
ser así ya que pueden
hacerse en espacios más
amplios lo que aumentaría la
dosis de resistencia
específica (hasta campos
normalizados) y los metros
de velocidad disminuyendo
las rectificaciones y
necesidad de velocidad
gestual y decisional con lo
que conlleva a nivel
táctico.
Utiliza el espacio adecuado
en base a tus objetivos.
A nivel de
TIEMPOS
Muy importante ya que
debemos valorar los trabajos
planteados y, en función de
ellos, marcar lo que
buscamos. Las posesiones
pueden determinarse desde
bajos volúmenes (por ejemplo
en un 3x1 podemos movernos
entre 30’’ y 1’ por el
componente de exigencia) a
muy altos (un 8x8+2 puede
alargarse sin problema más
de 20’, 30’, etc.)
Todo ello va a depender del
tipo de beneficio que busque
con su trabajo, los
componentes de resistencia
y/o velocidad que se dan
cita van a depender de esta
carga.
En la pasada entrada en esta
web hablábamos de cómo los
tiempos en los trabajos de
resistencia van a
condicionar los objetivos.
Estos tiempos, aumentados
por una correcta
organización de los espacios
van a potenciar la labor de
las posesiones.
A nivel de
AGRUPAMIENTOS
Partamos de la base que
determina este cuadro de
relación:
Diseño de posesiones:
propuestas
Con todo ello tendremos los
ingredientes suficientes
para crear una serie de
posesiones con unos
objetivos marcados. Lo que
te ofrecemos es una
ejemplificación sencilla de
cómo dar diferentes enfoques
a las posesiones para desde
ellas crear múltiples
ejercicios específicos.
Todas ellas podemos
modificarlas en espacios,
tiempo y agrupamientos
reincidiendo en lo comentado
en las líneas anteriores:
Posesión 1.
Con cambios de campo |
El cambio de
orientación (al
pitido) hace que
metamos una
progresión en el
juego lo que
potencia el trabajo
físico con un
recurso necesario en
el fútbol
(recuperaciones,
transiciones, etc.). |
 |
Posesión 2.
Con pivotes
|
El tener un equipo
por fuera aporta un
mayor solvencia a la
hora de mantener el
trabajo. Puede
variarse este
ejercicio haciendo
que alguno de los
pivotes esté dentro
de la posesión.
Es muy recomendable
la presencia de
pivotes para, desde
cualquier
planteamiento, dotar
de una pequeña dosis
de superioridad que
favorecerá la
posesión y los
objetivos buscados. |
 |
Posesión 3.
Con desdobles
|
Este es un ejemplo
sencillo del
condicionante que
supone la
superioridad + los
agrupamientos. Un
equipo siempre está
dentro intentado
robar, al pitido
como vemos se
desdobla en dos
subgrupos.
Este tipo de
trabajos podemos
haherlos a tiempo
fijo (los verdes
roban 2’ en la zona
centro y 1’ en los
extremos) o “tipo
rondo” es decir el
que pierda el balón
automáticamente pasa
a robar. Esto hace
un trabajo irregular
en lo físico pero
premia el objetivo
del juego. El
desarrollo puede
completarse con
cambio de rivales en
los desdoblamientos. |
 |
Posesión 4.
Con zonas prohibidas
|
En esta posesión los
porteros son pivotes
de campo (juegan con
el pie) pero con
terreno delimitado
(sólo se pueden
mover en una zona
tipo portería) y hay
una zona prohibida
donde nadie puede
entrar. Este tipo de
posesiones fomentan
el juego,
transiciones y
salida condicionada
de balón.
Puede variarse la
zona prohibida o las
dimensiones y forma
de nuestro terreno
en base a los
objetivos. |
 |
Posesión 5.
Competitivas
|
La posesión puede
ser un excelente
medio de desarrollo
competitivo. El
control del tiempo,
del resultado, la
lucha ante una
adversidad, etc sólo
surgen en estas
situaciones. Este
conocido y sencillo
juego propone 3
campos de 1ª, 2ª y
3ª división y se dan
3 pitidos. Se anota
un tanto quien
tenga la posesión al
pitido. El mejor de
3 se considera que
gana y asciende de
categoría (el que
pierde desciende) |
 |
Posesión 6.
Con rueda |
El diseño de
ejercicios en los
que las variables de
cambio y el rival
son cambiantes
aumentan la
concentración, la
diversidad y la
atención.
Este tipo de
trabajos son menos
automáticos.
El cambio de rival
aporta variantes
tácticas al juego.
El esquema siguiente
es sólo un ejemplo
de posible
organización.
Nota:
Los equipos que
esperan tienen un
trabajo técnico
paralelo |
 |
Posesión 7.
Previas a otros
trabajos |
Durante un partido
se producen
múltiples
situaciones de
disputa sobre el
terreno en el que la
posesión es vital.
Bien en zona
defensiva, en salida
jugada, en creación
o definición… pueden
darse situaciones
que aisladas
parecerían un 4x3,
3x2, etc. Por ello
podemos introducir
las posesiones
dentro de otros
trabajos globales en
las que el éxito de
éstas sea el inicio
del éxito del juego
global o partido.
Múltiples ejercicios
se pueden proponer
como el que dejamos
de ejemplo: |
 |
En suma las posesiones son
un recurso de múltiples
caras que puede aportarnos
una dosis de juego
específico con un trabajo
físico, táctico o incluso
estratégico paralelo. Pero
esto debe de plantearse
desde una conciencia clara
de lo que buscamos y en base
a ello una propuesta
metodológica a nivel de
agrupamientos, tiempos o
espacios para evitar el
jugar por jugar simplemente.
Puedes ver más en mi blog
personal:
http://clubdefutbolblog.blogspot.com
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