El Ceares con la victoria obtenida hoy frente al Vetusta da un paso de gigante hacia la permanencia y vence por 3-0 por segunda semana consecutiva y sigue dependiendo de sí mismo para lograr la permanencia. El partido comenzó con retraso por el encendido de bengalas y de otros artefactos pirotécnicos en el fondo próximo a los vestuarios del estadio gijonés por parte de la afición local que abarrotó el campo con casi 1.000 espectadores presentes. Al ser el día de la madre, las madres de los socios cearistas entraban gratis al campo. Ésta fue una de las medidas que se tomaron por parte de la directiva local para llenar el campo.

El partido empezó con un Vetusta que quería el balón. El conjunto local no se lo disputaba, pero cerraba bien los espacios –no en vano Teto, habitual central, estaba hoy en el mediocampo como stopper- para que los Espina, Hevia y David no pudieran combinar con facilidad y crear ocasiones de gol. Además en el primer acercamiento claro de los locales Pelayo, adelantándose a una dormida defensa azul, remató al fondo de las mallas de Adrián una falta lateral perfectamente sacada por Gonzalo. Al conjunto local le salía todo a pedir de boca en los primeros compases del encuentro.

El Vetusta siguió con el mismo guión y el Ceares, con el marcador a favor, no varió ni un ápice su planteamiento de esperar, robar y salir a la contra. Era un planteamiento arriesgado de los locales, pero el Vetusta no tenía su día y jugaba excesivamente lento y le costaba mucho combinar cerca del área. Chus Hevia y Pablo Espina le ponían calidad y ganas, pero la defensa local estaba muy sobria. Un lanzamiento directo de falta de Pablo Espina fue repelido con muchos apuros por Edu. Sin más, se llegó al descanso.

En la segunda parte el guión no varió, pero el Vetusta tuvo dos ocasiones bastante claras. Dani con todo a favor remató desviado y Chus Hevia no pudo definir con claridad ante Edu. El ‘10’ del Oviedo ‘B’ reclamó amargamente ante Espiñeira Pello que le habían trabado por detrás cometiendo penalti. Fermín decidió retirar del campo a un cansado Pablo Espina y a Chus Hevia, que estaban siendo los mejores del Vetusta, para dar entrada a Omar y Chamorro que apenas intervinieron en el juego, aunque Omar en el primer balón que tocó dispuso de una buena ocasión para empatar, pero Juan Carlos interceptó con el cuerpo el disparo del delantero del Vetusta que llevaba muy malas intenciones para Edu.

A la media hora del segundo acto Jimmy pudo poner el 2-0 pero con todo a favor chutó por encima del larguero. No perdonaría pocos minutos después. Pelayo le gana la disputa por el balón a Tato, gana la línea de fondo y centra. Catú rechaza el balón a la frontal dónde Jimmy, solo y con toda la calma del mundo controla y empala un derechazo pegado al palo ante el que Adrián no puede hacer nada. 2-0 y el estadio enloquecía con la victoria. Este mazazo tocó y hundió al Vetusta definitivamente que todavía en tiempo añadido encajó un tercer gol de Jimmy, al batir éste a Adrián en el mano a mano con mucha clase y completando una actuación fabulosa del centrocampista que se rumorea será jugador del Unión Popular de Langreo la próxima temporada. Tras este gol el colegiado avilesino Espiñeira Pello señaló el camino de vestuarios y entonces estalló la fiesta en el campo gijonés, aunque la afición es consciente de que el equipo no se encuentra salvado aún.

El Ceares sigue dependiendo de sí mismo para lograr la permanencia y ganando el domingo que viene al Navarro en Valliniello certificará la permanencia en la Tercera División. El Vetusta dependerá de resultados ajenos para poder salvar la categoría.

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