Corre una frase por los mentideros habituales gijoneses que reza que si el Sporting llega a 43 puntos se salva seguro. Es probable que sea cierto pero lo que sí es cierto es que hoy el conjunto de Javier Clemente se ha impuesto con una inusitada solvencia a un equipo que en casa venía mostrando una muy buena línea.

La clave para Clemente era anular a Verdú en la construcción de juego local, y lo consiguió poniendo a Gálvez como su sombra. El granadino ha demostrado varias veces que en estas lides se maneja muy bien, y como hizo con Rakitic el día del Sevilla en el Molinón, anuló al jugador catalán absolutamente. Una vez ‘atado en corto’ Verdú el Espanyol sufre, y sufre mucho. Tanto que sus ocasiones de peligro se limitaron a arreones de Sergio García y  Coutinho, que tuvo la ocasión más clara del primer tiempo, pero Juan Pablo soberbió rechazó su disparo. Sin embargo, el Sporting salió más enchufado y Ayoze, De las Cuevas, Gálvez y Sangoy tuvieron buenas ocasiones para adelantar al Sporting, pero la escasa puntería o la buena actuación de Cristian Álvarez bajo palos evitó que el marcador se moviese en esta primera, aunque entretenida, primera parte.

La segunda parte no pudo comenzar mejor para los rojiblancos, Pochettino se lanzaba al ataque total quitando a su pivote defensivo y metiendo a Álvaro, un segundo punta y a los dos minutos Trejo recoge un balón en campo rival. Avanza, mira al área y centra a la cabeza de Sangoy, que con un sutil toque deja solo a Adrián Colunga delante de Cristian Álvarez y el punta cedido por el Getafe no perdona subiendo el 0-1 y celebrándolo con una rabia impropia del ovetense. El Sporting se conseguía adelantar en el mejor momento.

El Espanyol no reaccionaba mientras que el Sporting se mostraba muy cómodo sobre el césped de Cornellá y Sangoy tuvo en una buena galopada de Don Alberto Lora –mayúsculo de nuevo su partido hoy como pivote único- por banda derecha y su centro raso a la frontal es rematado por Sangoy pero Cristian Álvarez despeja acrobáticamente a córner. Clemente introdujo a Mendy para aprovechar las contras y a Rivera por un lesionado Miguel de las Cuevas, en el mediocampo para oxigenar a Lora y ayudar en la contención. Este último cambio fue fundamental por dos razones.

La primera fue en el minuto 70, que llegó la sentencia, Sergio García pierde un balón en el mediocampo ante el propio Rivera y el Sporting monta una rápida contra que termina con un Trejo solo ante el portero que, con todo el temple del mundo, bate suave por bajo a Cristian Álvarez. El Espanyol tocado y hundido. Y apenas 10 minutos después la segunda, Rivera pone un balón de lujo a un recién incorporado Mate Bilic que bate con comodidad al meta argentino del Espanyol.

Los últimos minutos sobraron aunque los pocos espectadores que quedaban en Cornellá apoyaban a los 400 desplazados sportinguistas en cánticos de “el Sporting es de Primera, es de Primera”.

El martes a las 20:00 en el Estadio de El Molinón el Sporting se enfrenta ante una nueva final, la más dramática de toda la temporada, a vida o muerte con el Villarreal de Miguel Ángel Lotina, que marca la zona de descenso con 4 puntos de ventaja, tras empatar con Osasuna en la jornada de hoy, sobre el Sporting.

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