El Sporting agrava su situación al caer goleado frente al Atlético de Madrid con Falcao como estrella.

El Atlético de Madrid goleó con justicia al Sporting de Gijón por 4-0 en un partido en el que el colombiano Falcao se reivindicó como principal estrella del club colchonero.

Preciado introdujo novedades en el once titular y el equipo volvió a pagarlo caro una vez más. Cuéllar en la portería, Carmelo por la derecha, Damián en el lateral izquierdo, Ricardo León en el mediocentro y Trejo en punta fueron las novedades en el once de Preciado. 

Era el debut de Ricardo León como jugador sportinguista en partido oficial, y pese a que el equipo se vio superado en todo momento, el de Los Realejos respondió de manera positiva y fue de los pocos que dieron la talla. 

Desde el principio el equipo de Manzano se erigió en dominador y poco a poco fueron llegando las ocasiones para los locales.

Pronto llegó la polémica de la mano de Iturralde, un árbitro que no gusta en ningún lado y que ayer demostró el por qué: antes de que se cumpliera el primer cuarto de hora el trencilla no señaló un claro penalty de Botía a Falcao; pocos minutos después anularía un gol totalmente legal a Falcao por una supuesta falta sobre Cuéllar en su salida. 

El público del Manzanares fue un clamor contra el árbitro. Por si fuera poco, no tuvo compasión a la hora de mostrar tarjetas a los jugadores gijoneses, ya que Lora en el minuto 2 fue amonestado en la primera falta sportinguista. 

El primer tiempo transcurrió con el Sporting muy metido atrás y el Atlético de Madrid llegando con excesiva facilidad por los costados en superioridad numérica, con Lora y Damián impotentes ante el empuje madrileño.

El primer gol no tardaría en llegar, corner botado por Gabi al segundo palo (como todos los que botó), Cuéllar duda en la salida y Falcao remata a gol, el balón tras golpear en Gregory deambula sobre la línea para ser empujado por Lora en su intento de despeje. 

El equipo asturiano buscaba a De Las Cuevas y Carmelo, ambos eran los encargados de llevar el peligro a la meta de Courtois pero no encontraban la profundidad adecuada. Además, Trejo era el referente arriba de los asturianos, y la verdad es que no tuvo su día, demasiado sólo y en ocasiones excesivamente individualista. 

La única ocasión del Sporting fue un tiro ligeramente alto de R.León, el tinerfeño fue uno de los pocos destacados en su equipo.

El marcador al descanso era la mejor noticia para el Sporting, pues con el 1-0 seguía vivo en el partido. 

En la segunda parte se vio otro Sporting, más decidido e incisivo en ataque, con una gran ocasión con Carmelo entrando sólo por banda derecha y centrando sin encontrar a De Las Cuevas, que reclamaría tímidamente penalti. 

Pero fue un espejismo. De nuevo el Atleti recuperó la batuta y dirigió el partido a su antojo. Falcao avisó con un balón al larguero de la meta de Cuéllar. 

En otro córner similar al del gol válido y al anulado, Cuéllar vuelve a salir en falso, circunstancia que aprovecha Domínguez para sentenciar con el 2-0.

Cuéllar realizó paradas de mérito ante Falcao y Koke en el primer tiempo, es un portero muy eficaz en remates que exigen buenos reflejos pero su punto débil en los corners es preocupante, cada corner botado en contra es prácticamente una ocasión de gol. 

Con el Sporting bajando los brazos llegarían los dos goles de Falcao. El primero tras burlar a media defensa rojiblanca y el segundo a balón parado, asignatura pendiente para el equipo de Preciado. 

Los cambios de Bilic, Ayoze y Morán no cambiaron el escenario, que seguía con el Atlético creando ocasiones. 

Al final 4-0, y el Sporting ha de despertar el domingo ante el Racing, ya que a pesar de ser el quinto partido de la temporada, es un partido decisivo.

Todo el mundo coincide en que las rotaciones en el Sporting no funcionan; esta vez quedaron fuera del once titular e incluso de la convocatoria jugadores como Canella, Nacho Novo, Barral o André Castro, lujos que el Sporting no puede permitirse. 

Preocupante es, ya no la falta de gol, sino de ocasiones, ya que el equipo apenas llegó a las inmediaciones de Courtois. 

Ya en rueda de prensa Preciado se mostró muy molesto por la imagen del equipo declarando: “Me considero máximo responsable de la mierda que hemos visto”.

Ahora toca mirar hacia delante y afrontar el partido contra el Racing como una final en la que es obligado ganar, ya que hay rivales directos que poco a poco se alejan de las posiciones de abajo. 

A los sportinguistas nos toca animar como sabemos y confiar ya que si hay un equipo y un entrenador acostumbrados a levantarse tras cada caída esos son el Sporting y Preciado.