Calurosa tarde en Gijón para presenciar
en el estadio de Santa Cruz el inicio de
la liga para el Gijón Industrial y el
Pumarín C.F.

El
partido se inicio puntualmente, con dos
equipos con un dibujo técnico similar,
4-5-1, en el que Luengo por parte del
Gijón Industrial y Ángel por parte del
Pumarín jugaban con una libertad que les
permitía sumarse como segundo delantero
en caso de necesidad. Durante los
primeros 15 minutos ambos equipos se
mostraron cautelosos en cuanto al
ataque, viviéndose un inicio de partido
sin ocasiones y en el que ambos equipos
estaban más preocupados de la faceta
defensiva que de la ofensiva. En el
minuto 15 se produce la primera
oportunidad reseñable a favor de los
locales, Luengo se hace con el balón en
el medio campo y avanza a trompicones
ante el acoso de los jugadores del
Pumarín, un pase en profundidad para
Javi, quien se interna por la izquierda
al entrar en el área es derribado
claramente por el defensor Allonca. Esta
jugada fue invalidada por fuera de juego
de Javi, pero demostró claramente cual
sería la tónica del arbitraje, un
árbitro inseguro y unos linieres muy
lentos marcando las infracciones. El
ánimo de los más de 250 espectadores se
fue calentando cada vez más a partir de
este momento tanto por el arbitraje como
por el partido trabado en el que
entraron ambos equipos. Se vieron muchas
quejas hacia las faltas del Pumarín a
pesar de hacer la mitad que el equipo
local. En el minuto 20 la primera
ocasión con peligro del equipo visitante
una falta desde la derecha lanzada por
Abilio termina en córner tras el rechace
de la defensa. Los minutos avanzan con
un mayor control por parte del Pumarín
pero sin que ninguno de los dos equipos
logre llegar con claridad al área rival.
En el minuto 30 otro córner a favor del
Pumarín, a punto estuvo de costarle un
disgusto al equipo local, el centro de
Abilio es mal rechazado por la zaga
dejando el balón muerto en el área que
no es aprovechado por el Pumarín. Estos
eran los mejores momentos del equipo
visitante, buscando el ataque por las
bandas con un juego directo mientras que
el Industrial mantenía el orden atrás y
buscaba las contras pero sin definición.
El partido continuó en la tónica
general, el árbitro excesivamente
puntilloso en los saques de falta, en el
minuto 33 mostró la primera amarilla del
partido a Javi, lateral derecho del
Pumarín, por una falta sobre Raúl, al
llegar tarde al cruce. Esta jugada que a
priori podría parecer sin mayor
transcendencia supuso un aumento de la
tensión entre los jugadores que iría en
aumento a lo largo del partido. A partir
de aquí hasta el final de la primera
parte el Gijón Industrial se fue
haciendo con el control del partido. Lo
que no impidió una ocasión para el
Pumarín en el minuto 37, un buen pase de
Abel para Ángel, quien le gana la
espalda a la defensa pero su remate con
la derecha se fue alta. En el minuto 44
Luengo realiza un centro-chut que obliga
a Toni a hacer una estirada a su
izquierda y enviar el balón a corner.
Dos minutos después un centro de Luengo
desde la izquierda al que no llega David
se termina envenenando haciendo que Toni
se vuelva a tener que lucir y despejar
nuevamente a córner. Cuando parecía que
el partido se dirigía al descanso, un
balón en largo hacia Luengo termina en
un penalti claro de Robledo, que no es
pitado por el árbitro, pero un rifi rafe
entre ambos termina con Luengo en el
suelo. Penalti y expulsión para el
jugador del Pumarín. El lanzamiento de
Luengo a la derecha del portero se va
rozando el poste. EL final de la primera
parte termina con la discusión entre los
jugadores, iniciada tras el penalti y un
malestar general entre el público con el
arbitraje.
La
segunda parte se inició con el Pumarín
reestructurado, Allonca, pasó al lateral
izquierdo de la defensa, Rieu se colocó
de central quedando Ángel como único
delantero. El Gijón Industrial hizo
valer su superioridad numérica para
hacerse con el control del partido. Dos
jugadores serían clave en esta segunda
parte, Luengo y Oscar, el primero muy
batallador y con gran movilidad, el
segundo por la banda izquierda aprovechó
su velocidad para hacer daño al Pumarín.
Ambos jugadores fueron de menos a más a
lo largo del partido igual que su
equipo. En el minuto 50, Luengo realiza
un buen remate que es rechazado a córner
por Toni. En el minuto 55 el Pumarín
demostró que seguía en el partido un
saque del portero es prolongada de
cabeza por Jairo, el balón llega a
Abilio quien intenta una vaselina que es
despejada por el portero a córner.
Continuó el control por parte del Gijón
Industrial, pero sin lograr materializar
la superioridad en ocasiones de gol.
Durante la última media hora, el
nerviosismo se fue apoderando del equipo
local atacando con más corazón que
cabeza, mientras el Pumarín comenzaba a
creer en la posibilidad de salir vivo de
Santa Cruz. Los cambios de jugadores
fueron rompiendo el ritmo del partido,
unido a las constantes faltas por parte
de ambos equipos. Jairo fue muy
discutido por parte del público, por su
dureza en el juego pero realizó muy bien
su labor de contención, poco bonita pero
muy necesaria. El Pumarín se fue
consolidando defensivamente y se atrevía
a realizar contras como en el minuto 70
en la que Valito no llega por muy poco a
un balón largo desde la defensa. El
Gijón Industrial acusaba el cansancio,
así en el 85 se produjo uno de los pocos
errores de la defensa local, un pase por
alto de Abilio a Ángel, deja al
delantero visitante solo ante el portero
al que supera con una vaselina, pero el
bote del balón desvía su trayectoria.
Cuando parecía que el partido acabaría
con el empate a cero, se produjo un
penalti tan evidente como innecesario,
un balón largo hacia Javi termina con un
agarrón por parte de Román. Berto recién
entrado en el campo, transforma el
penalti. El partido termino al igual que
en el descanso, con un árbitro muy
discutido por el Pumarín y por la
afición.
