Los de Abelardo Fernández se imponen en El Candín y se la jugarán el sábado en La Fresneda ante el Universidad

Partido entretenido el disputado esta tarde-noche en el municipal de El Candín entre el Tuilla y el Real Avilés. Los de Abelardo, necesitados de la victoria para poder seguir vivos en esta competición, salieron a por todas desde el principio, aunque el primer cuarto de hora transcurrió sin un dominador claro, con continuas disputas de balones aéreos, como hasta ahora era tónica en El Candín. Pero con “El Pitu”, este equipo parece darle mejor trato al balón y no busca tanto el juego directo. En este primer tramo del partido, no hubo ni un solo tiro entre los tres palos y los únicos que se atrevieron a probar fortuna fueron Mini por los arlequinados y Borja Prieto por los de la Villa del  Adelantado. Por cierto, Borja y Naya volvían al campo donde consiguieron la temporada pasada muchos de los goles que les sirvieron para ser los dos máximos goleadores de la tercera asturiana.

A partir del minuto 16 y tras un tiro cruzado de Omar que se va fuera, el Tuilla comienza a coger las riendas del encuentro y a combinar con mayor acierto, pasando a jugarse más tiempo en terreno avilesino- El primer tiro entre palos del partido lo realiza Omar en el 25 en una falta frontal que ataja sin problemas David. Las llegadas tuillenses estaban siendo mas constantes y así en el 29 y tras saque de puerta de Adrián, los centrales dudan y el bote hace que Omar se plante solo ante David, quien saca el balón a corner. El saque de esquina es botado por el propio Omar y Tito, entra como una exhalación al segundo palo batiendo la meta avilesina.

El bagaje ofensivo del Avilés en esta primera parte se limita a un tiro por encima del larguero sin problemas de Miguel, quien en el 42 reclama un inexistente penalti en una jugada que ya estaba invalidada por fuera de juego.

La segunda parte comenzó con un Avilés con más llegada y posesión, sin embargo fue el Tuilla el que pudo doblar su cuenta en una rapidísima contra por banda izquierda de Omar, que habilita con su pase a Yoni, disparando de volea desde la frontal y David vuelve a salvar la meta avilesina.

Y como en el fútbol quien perdona la paga, el Avilés consiguió la igualada en una jugada de Abraham por la derecha, su disparo es rechazado y el balón sale muerto a la frontal donde Borja Prieto engatilla un disparo seco que entra por el centro de la portería. Corría el minuto 11 de la segunda y era el primer tiro entre los tres palos del Avilés. El juego volvió a estar equilibrado y en el minuto 21, el árbitro señala un claro libre indirecto dentro del área por falta de Juan que elevó la pierna a la cara de Leiras. La falta se toca en corto para Tomás quien coloca el balón en el hueco que había en el palo que debería haber sido cubierto por David, que en su único fallo en todo el partido, estaba colocado detrás de la barrera sin visión alguna..

El Avilés volvía a tener que remar en contra y así Abraham en el 72 se hace un hueco en la frontal hacia su pierna buena y lanza un zapatazo que desvía Adrián con una estirada y saca el balón por encima del larguero.

En el 75 el Avilés vuelve a igualar, tras sacar Abraham una falta inexistente tras un piscinazo suyo, y Miguel adelantándose en el punto de penalti, marca de cabeza ante la salida de Adrián.

Eran los mejores minutos del Avilés y en el 77, Juan coge una volea que sale lamiendo el palo de los dinamiteros.

A partir de aquí, el Tuilla vuelve a coger el mando del partido y tras alguna llegada de Omar, se produce en el minuto 84 la jugada que acabó decidiendo el choque. Un balón largo y diagonal a la espalda de la defensa, provoca una pugna entre Sietes y Borja Arguelles. El pícaro delantero gijonés, le gana la partida al veterano lateral, provocando su fallo en el despeje y plantándose solo ante David, a quien batió con excesiva frialdad. El delirio llegó a las gradas.

De aquí al final, el Avilés trató de igualar con juego directo, colocando incluso al central Marcos de delantero centro.

Al final, justo resultado por los méritos de uno y otro, lo que hace que el “grupo de la muerte”, esté igualadísimo. Con los tres equipos con los mismos goles a favor y en contra, por lo que un empate a cero el sábado en La Fresneda, provocaría un empate a puntos y a goles entre los tres.