El técnico burgalés selló su continuación en el club firmando un año más de contrato esta misma tarde.

Era cuestión de tiempo, ambas partes estaban interesadas y en la tarde de hoy se firmó el acuerdo para la próxima temporada en los despachos del club en el Carlos Tartiere, con presencia de las únicas cabezas visibles del club, Alberto González, presidente y máximo accionista, Ángel Martín Vaca, vicepresidente de la entidad y José Manuel Martínez, director deportivo.

Se la había ganado. José Rojo Pacheta, desde su llegada el 15 de Febrero, relevando en el cargo a José Manuel Martínez, ha conseguido números de campeón, 32 puntos de 39 posibles, algo que tiene mucho mérito si se mira la situación en la que estaba la plantilla, al borde del descenso, en una dinámica negativa...

Cambio radical

Los jugadores eran los mismos, exceptuando el cambio de Pascual por Richi. El once siguió siendo parecido, el esquema sufrió ligeros retoques... pero el cambio fue radical. La actitud de los jugadores, el estilo de juego, la seriedad del bloque... todo hizo pensar que estábamos ante un nuevo equipo, un equipo que si se hubiera conseguido clasificar para el play off de ascenso a Segunda División hubiera tenido serias opciones de ascender. Los números fueron apabullantes, 10 victorias, 2 empates y 1 derrota.

Demasiado tarde

El tiempo perdido con Pichi Lucas y José Manuel en el banquillo unido a la apatía de jugadores que con la llegada del burgalés se pusieron las pilas, hicieron que el Real Oviedo perdiera una temporada tirada a la basura y de la que sólo se puede sacar como nota positiva el tiempo para preparar la próxima temporada, algo que parece que volverá a hacer el culpable directo de esta temporada, el director deportivo.

Renovaciones

El domingo los jugadores finalizarán sus entrenamientos y comenzarán las ofertas de renovación, se espera una plantilla algo más corta y que mantenga el bloque de esta temporada. Con contrato sólo quedan Aulestia, Juanma, Pelayo, Falcón y Nano, por lo que con la renovación del entrenador plasmada en papel, es cuestión de tiempo que se empiecen a producir las primeras renovaciones.