Día festivo en La Cruz, el día del acompañante intentaba dar un color a una grada ya de por sí animada, pero la directiva consciente de la necesidad del equipo, tras cinco derrotas, quiso arropar a los suyos. La gente respondió animada por una tarde soleada. Contaba el Ceares con la llegada de un nuevo jugador, Vichu tras su periplo por China vuelve al equipo en el que jugó la temporada pasada.

Empezó apretando el conjunto visitante, y pronto daría un susto a la parroquia local, Dani Vior en una contra remata duro con la derecha obligando a Edu a despejar a córner. En el 13´llegaría el primer gol, falta al borde del área que Alberto lanza por debajo de la barrera sorprendiendo a Edu que no puede hacer nada por evitar el gol. Tras el gol el Ceares se va haciendo con el dominio del encuentro, mientras el Pumarín baja el pistón cómodo con la situación, el conjunto local a pesar de dominar no logra pisar área rival y el Pumarín se echa a dormir olvidándose de atacar. En el 38´llegaría el empate y la polémica, centro de Varo que Jimmy remata de cabeza solo en el área. Los defensas ovetenses pidieron insistentemente falta del delantero gijonés, lo cierto es que su marcador se fue al suelo antes de que el capitán rematara, pero no pudimos ver con claridad si hubo o no infracción.

Al regreso del descanso, fue el Ceares quien tomó ventaja en el marcador, al transformar Borja un penalti, por derribo del portero Toni a su capitán Jimmy en el 48. Los jugadores locales, muy mermados por las bajas, trataron de defender el resultado con el apoyo habitual de la grada la de La Cruz, pero se volvió a ver algo habitual en el conjunto de Angulo, una tendencia a recular y a dejar el balón al contrario que casi nunca sale bien. El Pumarín espoleado por la necesidad de verse coqueteando con el descenso, tiró de casta y empezó a asediar la meta rival. Esto convirtió el partido en un correcalles, el Pumarín descuidaba la defensa y el Ceares intentaba matar el partido en un contra. En el 70´llegaría el empate, Alberto saca una falta en el medio campo el balón llega al área, donde Vior remata muy duro, Edu no puede más que rechazar un balón que le cae a Ángel solo en el segundo palo que remacha a placer.

Hasta el final del partido, dos ocasiones más, una para cada equipo. J. Carlos remató solo un córner, pero el balón se fue lamiendo el poste. Y Alberto en una jugada similar a la del segundo gol visitante, envió un balón al área que se fue envenenado, nadie despejó y al final Edu tuvo que meter la mano para desviar a córner. 

Al final reparto de puntos que dejan a un mermado Ceares con el agua al cuello y la necesidad de puntuar en Villaviciosa el miércoles. Por su parte el Pumarín dejó dudas sobre su juego y su solidez defensiva.

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