Pichi Lucas consiguió su primera victoria como entrenador celtiña ante el filial rojiblanco, que no estuvo acertado.

Esta no fue la tarde del Sporting B. Los de Manolo Sánchez Murias salieron sin la ambición de otras ocasiones, y de eso se aprovechó el filial del Celta de Vigo. El dominio fue de los gallegos, y aunque avisaban a la portería contraria, sus acciones apenas tenían peligro, hasta que en el minuto 23 Jota, el mejor del partido, cedió un balón bombeado a Eric, quien, mediante una parábola, puso a los celtñas por delante. A razón de ese tanto, el Sporting B no supo reaccionar hasta el comienzo de la segunda parte, donde llevó algo de dominio durante los primeros veinte minutos del segundo periodo. Sin embargo, Jota volvió a arruinar los intereses del filial sportinguista. Corría el minuto 22 del segundo periodo cuando el mediapunta realizó una brillante jugada personal. Internó en el área dribló a varios defensas y de tiro cruzado puso el segundo para los gallegos. Poco más se puede contar de un partido donde apenas se vieron tiros a puerta y en el que el más necesitado fue el que se llevó el gato al agua.

ÁLBUM DE FOTOS