LA INVIABILIDAD DEL ACTUAL SISTEMA DE LA 2ªB

La crisis económica obligará a varios clubes a desaparecer esta temporada. El primero en renunciar a seguir compitiendo ha sido el Cerro Reyes Atlético.

Todos los años, por estas fechas, muchos clubes de la 2ªB comienzan a mirar sus arcas para comprobar si tienen el suficiente dinero para abonar todos los salarios a sus jugadores, para que de este modo, no les denuncien. Otros más precavidos, incluso comprueban si tienen garantías de pago para saldar sus deudas con hacienda y la seguridad social. Pero siempre nos encontramos con esas entidades cuyos dirigentes no han hecho bien los deberes. Es más. Jamás los han hecho.

Parece ser que muchos de ellos, antes incluso de la aparición de la archiconocida crisis económica que nos azota, ya realizaban sus trampas. Ofrecían salarios desorbitados a futbolistas y técnicos para intentar dar el salto de categoría en un abrir y cerrar de ojos. Pero en muchísimas ocasiones esos intentos se convertían en saltos al vacío que finalmente se consumaban en meras permanencias o, en el peor de los casos, en descensos deportivos, por aquello de que en un gallinero no es conveniente tener más de un gallo.

2011 volverá a ser un año de esos. Veremos a dirigentes de clubes arrodillarse ante ayuntamientos y gobiernos autonómicos (ya les hayan criticado o no durante la temporada), carreras a lo loco para demostrar que han pagado a todos los integrantes del equipo, denuncias por doquier, amenazas ante los medios de comunicación, colectas para salvar equipos, anuncios por palabras en los que se solicita dinero, injurias contra publicistas y empresas, etc.

Lo más triste, por parte de aquellos que logran salvarse de la quema, es que, a la temporada siguiente, tras verle las orejas a un lobo que les pedía que se apretasen el cinturón, deciden volver a tirar la casa por la ventana y, por lo tanto vuelven a las andadas, cual pescadilla que se muerde la cola. Otro aspecto lamentable es el miedo a reducir la Segunda División B. Me explico. El puesto que deja un club por no cumplir con sus pagos tiene que ser ocupado por otra entidad, por lo que se recurre a uno de los equipos que estuvo luchando durante el mes de junio por dar el salto desde Tercera sin lograrlo en los campos. Pero el aviso no llega ni a finales de junio ni a principios de julio… Llega en pleno mes de agosto, cuando los directivos ya tienen diseñado el equipo para Tercera División, tanto deportiva como económicamente, por lo que se puede empufar otra entidad.

Pero ese miedo por contentar a todos continúa. Al comprobarse que el sistema actual de 2ªB es un agujero negro, los organismos no han movido absolutamente nada para descongestionar el problema. Hay directivos que han propuesto una reducción tanto de grupos (de 4 a 2) como de clubes (de 80 a 40), dividiendo a las entidades por proximidad geográfica (grupo norte y grupo sur, ubicando a los equipos canarios junto a los madrileños para facilitar sus desplazamientos). Pero de momento no hay respuesta alguna (quizá por ese pánico a que les digan que una temporada, en cada grupo, descienden a Tercera más de diez equipos). Además hay quien ha planteado la creación de una liga de filiales, pero como hemos visto, esta idea se ha ido al limbo. 

La Segunda División B necesita urgentemente una restructuración. Y lo primero que tendría que hacer competición es solicitar unos avales a principio de temporada que aseguren que todas las entidades tienen capital suficiente como para saldar sus deudas a finales de la misma, para que dejemos de ver esas imágenes de gente llorando porque su equipo ha descendido no en los campos, sino en los despachos.